Publicado: 21-09-08

Jujuy.- El rol preponderante de los organismos de contralor de los gastos públicos fue destacado por representantes provinciales y autoridades del Secretariado Permanente de Tribunales de Cuentas, Organos y Organismos Públicos de Control Externo de la República Argentina, durante la reciente jornada de actualización doctrinaria del sector efectuado en nuestra provincia.

Cabe señalar que presidieron dichas jornadas el contador Rubén Quijano (Chaco), titular del Secretariado de Tribunales de Cuentas de la República Argentina, y la presidente local del Tribunal de Cuentas de Jujuy, doctora Nora del Valle Millone Juncos.

El contador Rubén Quijano habló de la situación y desafíos que plantea el funcionamiento de los organismos de control de los poderes públicos del Estado, desde la asignación presupuestaria necesaria para dicho cometido, el control preventivo como reaseguro de la inversión pública, y hasta la imperiosa independencia del poder político, de quienes la presiden.

Quijano destacó que "la capacitación de los organismos de control del país, público y externo, es algo muy necesario para los organismos a quienes estamos representando. Capacitarnos y dar un control cada vez mejor en todo sentido. Es importante que el control público externo sea eficiente y a su vez, apoyado tanto técnica como financieramente a través de su presupuesto. Esto tiene que entender el poder político argentino".

Admitió que en algunas provincias, "hay algunos problemas, pero trataremos de ir solucionándolos, algunos más graves que otros, pero estamos preparados para responder con mucha seguridad y con mucho fundamento, el por qué de la defensa de la independencia, de las funciones jurisdicciones y de un buen presupuesto".

Respecto a la independencia de quienes integran los tribunales de cuentas respecto del poder político de turno, indicó "eso está establecido en cada una de las constituciones y leyes provinciales. La mayoría son nombrados por el Poder Legislativo, algunos con propuestas del Poder Ejecutivo, pero no hay uniformidad respecto a esto. Este es un país federal".

"Obviamente tenemos que ser independientes, no hay otra forma de ejercer el control. La independencia de los poderes del Estado es fundamental", remarcó.

Por su parte, la doctora Nora Millone Juncos consideró, "lo valioso de esto es conocer la problemática de todos los tribunales, afortunadamente por lo que dijo el presidente del secretariado, Jujuy no tiene el problema que se está dando en otras provincias. Al contrario, aquí el poder político tanto Legislatura como el Ejecutivo, no solo se someten al control, sino quieren el control, y eso es bueno".

En relación a los municipios, expresó "controlamos a los 60 municipios de la provincia, a quienes no formulan rendiciones de cuentas, los invitamos a realizarlos, si no, actuamos de oficio para controlar la hacienda pública".

Respecto a la tarea de contralor, que hace que en algunos casos recién se resuelvan expedientes de vieja data, la doctora Millone Juncos señaló, "a veces es engorroso explicar el trabajo del Tribunal de Cuentas. Tenemos alrededor del 60 o 70 % de los organismos que están rindiendo sus cuentas al día y el 50 % de los municipios que lo están haciendo. Por allí se ven expedientes viejos del año '96 o '98, pero es porque están con recursos. No es porque recién estemos controlando de esos años, sino estamos muy actualizados. En los últimos tres años ha tenido realmente mucho impulso".

"El Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo nos han provisto de recursos humanos y materiales. Seguiremos insistiendo porque de pronto, 180 personas para el tamaño de control que hacemos, se hace dificultoso", añadió.

Puso de relieve que el control preventivo de los gastos "es imprescindible. En estos momento se desarrolla en base a los tres poderes del Estado y la administración central y descentralizada, no así sobre los municipios. No tenemos control preventivo sobre los municipios, pero lo que nos interesa no es condenar a un funcionario por gastar mal, lo que nos interesa es prevenir que se gaste mal. Es decir, actuar con la debida premura, corregir desvíos que no necesariamente tiene que ver con corrupción, sino falta de procedimientos o de formas", finalizó.