Desarrollan tareas del Municipio pero son entidades que funcionan sin control. Elevan en un 11% el gasto salarial del Estado y manejan más de $ 19 millones.

Son seis y se llevan más de 19,1 millones de pesos por año. Desde que se crearon, la oposición cuestionó que conforman un Estado paralelo que, para colmo, funciona sin el control del Tribunal de Cuentas. Y que se usan como una bolsa de trabajo para encontrarles un puesto a los militantes políticos del gobierno. Ahora, por primera vez, se conoce cuánto gastan las fundaciones municipales en sueldos y cuál es el destino de las partidas que mes a mes reciben desde el Palacio de Mójica.

En total, los sueldos de Fundemur, la Fundación por la Cultura, el Perc, la Fundación Social, la Maternidad Kowalk y la Fundación para el Desarrollo Regional insumen 7.336.748 pesos por año, según señala el propio gobierno en el proyecto de ingresos y egresos que envió al Concejo Deliberante. Al mes, los salarios y las contribuciones patronales se llevan 611.395 pesos y elevan en un 11% el gasto en personal que hace el Municipio. Es decir, son engañosas las cifras que señalan que sólo el 40% del presupuesto general se va en sueldos.

Sólo las tres principales -Fundemur, Fundación por la Cultura y Fundación Social- tienen 278 trabajadores a los que les pagan mensualmente. 

Si se tiene en cuenta que su presupuesto general es de 19,1 millones de pesos, las fundaciones destinan el 38,4 por ciento de sus partidas a afrontar los sueldos. 

Fundación por la Cultura es la que más carga salarial soporta: el 69,76 por ciento de sus casi 3,9 millones de pesos se usan para pagar los servicios de los trabajadores.

Hasta ahora, el Municipio jamás había blanqueado cómo gastan las fundaciones. En cada presupuesto -excepto el que se votará ahora- sólo aparecían las transferencias globales que hacía el Municipio. Por ejemplo, se consignaba que a la Fundación Social se le daban 8,1 millones de pesos al año pero no se describía a qué destinaba semejante suma. Ahora, se detalla cuál será el destino de los fondos.

Según explicó María Alicia Panza, subsecretaria de Hacienda, está previsto que para el año próximo las fundaciones operen de la misma manera que cualquier dependencia municipal. "Si bien se van a seguir haciendo las transferencias, cuando ejecuten su presupuesto vamos a poder monitorear en qué gastan, si en bienes de consumo, personal o servicios", dijo.

Las fundaciones surgieron durante la gestión de Rins con el argumento de que harían más ágil el día a día en áreas clave y que aspirarían recursos del sector privado. En realidad, esos fondos externos son exiguos y lo cierto es que esas entidades operan sin el control del Tribunal de Cuentas. Así lo seguirán haciendo durante 2010, aunque ahora, al menos, se conocerá a qué rubros están asignadas las partidas.