La Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) presentó, ante el Congreso de la Nación, el informe anual 2022. El trabajo exhibe las acciones y proyectos que se realizaron en el marco del Plan Integral de Saneamiento Ambiental

La Cuenca Matanza Riachuelo ocupa 2047,86 km2, donde habitan más de 4.500.000 de personas. Su historia cuenta con más de 200 años de contaminación, debido al vuelco de los efluentes cloacales y de las actividades industriales productivas, y los residuos urbanos. ACUMAR es un organismo autónomo, autárquico, interjurisdiccional y tripartito, que se encarga de coordinar y dirigir la política ambiental de la Cuenca, atendiendo así la preocupante situación del río Matanza Riachuelo y su entorno.

En el informe se detalla sobre los principales programas que se implementaron en materia de control, monitoreo, evaluación y recomposición ambiental, gestión de residuos sólidos urbanos, salud, educación ambiental, obras hídricas y de infraestructura, ordenamiento y abordaje territorial, transparencia, información pública, participación social, fortalecimiento comunitario, promoción del desarrollo, y políticas de géneros y diversidades.

Durante 2022 se realizaron trabajos de mejora, desobstrucción y limpieza de cauces en 59 kilómetros de arroyo, lo que previno inundaciones, y se retiraron 45 mil toneladas de residuos de la cuenca. Se relevaron 30.000 personas en las Evaluación Integrales de Salud Ambiental en Áreas de Riesgo, y se brindaron 26.000 prestaciones por parte de ACUMAR para prevenir enfermedades zoonóticas y participaron más de 50 mil estudiantes en Escuelas por la Cuenca.

Se lograron avances estratégicos en el objetivo de lograr el saneamiento de la cuenca. La mudanza del Mercado de Hacienda de Liniers; la construcción del Parque Industrial Curtidor de Lanús y su Planta de Tratamiento de Efluentes Líquidos Industriales; la ampliación del sistema troncal de cloacas ejecutado por AySA; nuevas soluciones habitacionales a familias en riesgo ambiental.

En materia de recomposición ambiental se realizaron obras de mejora del espacio público en la ribera, conocido como Camino de Sirga, se retiraron los residuos de los arroyos de la cuenca, lo que evita el ingreso de los mismos al río Matanza Riachuelo. Además, se desarrollaron acciones de educación y salud ambiental en todos los distritos con el fin de generar una conciencia del cuidado del ambiente.