Por medio de la Secretaría de Control y Monitoreo Ambiental, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación presentó la plataforma Censos Costeros que servirá para combatir la contaminación marina en el territorio argentino. Con la herramienta se espera poder visualizar información relacionada a otros entornos como ríos, parques, lagos y ámbito rural. También incorporará los resultados del Censo Provincial de Residuos Costeros.

La plataforma alcanza al territorio costero del país y está orientada a las personas y organizaciones que realicen campañas, jornadas de limpieza y recolección de residuos en la zona. El objetivo principal es consolidar y recolectar datos relacionados a la cantidad de basura recolectada y a la composición de los desperdicios.

El formulario pretende ser una plataforma colaborativa que se enriquezca a partir de la participación activa de la sociedad. Desde el 2016, alrededor de 20 organizaciones ambientales realiza cada año en la provincia de Buenos Aires el Censo Provincial de Residuos Costeros, con el objetivo de hacer un seguimiento de la situación en la costa bonaerense, mediante el registro y posterior análisis de los datos obtenidos trabajando con los municipios participantes, para generar una base de información e investigación conjunta. La plataforma nacional incluirá los resultados de ese registro.

Se lanzó la plataforma nacional de residuos costeros

Cifras relevantes sobre el último censo costero

En Argentina, el 90% de las tortugas marinas atendidas en la Fundación Mundo Marino tiene plástico en su estómago o intestino.

Los datos del último censo costero corresponden al censo 2022. Del relevamiento se arroja que los tipos de contaminantes plásticos que más se encontraron en el mar fueron colillas de cigarrillo (26,4%), fragmentos plásticos (17,3%), envoltorios plásticos (13,5%), bolsas plásticas (11,7%) y tapitas (5,1%).

En total se colectaron 6.966 colillas de cigarrillos, un ítem que se repite todos los años entre los más abundantes. Diversos estudios indican que cada colilla puede contaminar entre 8 y 10 litros de agua del mar y hasta 50 litros si se trata de agua dulce. Este residuo está compuesto principalmente por acetato de celulosa, un material no biodegradable encargado de absorber las sustancias tóxicas del humo de tabaco, que puede tardar hasta 10 años en descomponerse y libera unas 15 mil fibras sintéticas al ambiente.  

Por su parte, los tipos de residuos de origen urbano encontrados en los ambientes costeros de la provincia de Buenos Aires difieren de aquellos que contaminan las costas patagónicas. Según los censos de residuos realizados por la Fundación Vida Silvestre, en el marco de las actividades desarrolladas por la Mesa Técnica de Residuos Costeros de la Provincia de Chubut, más del 50% de los residuos son producto de la actividad pesquera. Los principales hallados en la Península Valdés corresponden, en su mayoría, a cajones de pescado, sogas, redes, y varios tipos de envases y embalajes plásticos vinculados con esta industria.  

De acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) la producción de plástico creció exponencialmente desde 1950 llegando a los 322 millones de toneladas de plástico en 2015. Según proyecciones de esa entidad, la producción llegará a los 600 millones de toneladas y superará las 1000 en 2050. 

Asimismo, los residuos plásticos afectan al menos a 32 especies marinas: desde plancton hasta mamíferos marinos (como ballena franca austral, delfín franciscana, lobos y elefantes marinos), pasando por aves marinas (albatros, petreles, gaviotas y pingüinos) hasta tortugas (como la tortuga verde), sin dejar afuera peces (pejerrey, anchoa de banco, pescadilla real y de red, corvina rubia) e invertebrados (como cholga y mejillón), así como a una variedad de organismos marinos. En Argentina, el 90% de las tortugas marinas atendidas en la Fundación Mundo Marino tiene plástico en su estómago o intestino.