El Colegio de Auditores de la Nación aprobó una auditoría sobre el programa de Gestión de Residuos Radioactivos, en el ámbito de la Comisión Nacional de Energía Atómica. El periodo analizado estuvo comprendido entre enero de 2018 y mayo de 2020. 

El trabajo fue elaborado por la Gerencia de Planificación y Proyectos Especiales de la AGN y por lo tanto fue presentado por el auditor general, Miguel Ángel Pichetto, quien detalló algunas observaciones como la falta de algunos registros o de estrategias comunicaciones con la ciudadanía. 

"Hay que decirles a los argentinos que la energía nuclear es muy importante y que no contamina”, sostuvo el auditor Miguel Ángel Pichetto.

“No hay un inventario de los combustibles gastados y existe un incumplimiento en establecer un programa de comunicación social y participativo, en primer lugar, para decirle a la comunidad que la energía nuclear es buena”, arrancó Pichetto y agregó: “En un mundo en crisis en materia energética es muy importante mantener esta actividad nuclear en Argentina conjuntamente con las energías renovables. Hay que decirles a los argentinos que la energía nuclear es muy importante y que no contamina salvo, lógicamente, que pueda ocurrir algún evento desgraciado si no hay controles”. 

Acto seguido, el auditor general mencionó las recomendaciones de la AGN para el organismo auditado entre las que se destacan “realizar en tiempo y forma las presentaciones y actualizaciones de los documentos requeridos a fin de dar cumplimiento a la Ley a la 25.018 de residuos tóxicos, especialmente en relación al Plan Estratégico de Gestión de los Residuos Radiactivos, y los informes que deben presentarse ante el Congreso”. 

Además, la AGN le propuso a la Comisión Nacional de Energía Atómica, a través del informe, que brinde con mayor periodicidad las capacitaciones necesarias a efectos de mantener actualizado al personal involucrado con la gestión de residuos radioactivos y combustible gastado, en relación a los procedimientos operativos de las instalaciones y particularmente, con los planes de contingencia como el programa de evacuación transporte de materiales radiactivos.

El Caso Ezeiza

El informe de la AGN sobre la gestión de residuos radioactivos marca como un aspecto positivo el monitoreo realizado respecto a las instalaciones del área de gestión de Ezeiza, el cual tiene como fin asegurar un nivel adecuado de protección radiológica tanto del personal como del público en general y del medio ambiente.

“Se está haciendo un monitoreo para que no haya ninguna fuga radiactiva que pueda generar una afectación a los ciudadanos”, destacó Pichetto y concluyó que “si bien el programa de gestión de los residuos radiactivos lleva una adecuada gestión de los residuos, se detectan puntos de mejora para la gestión del programa y para la difusión de información fidedigna que aumentaría la confianza social y ayudaría al desarrollo de esta actividad”.