La asociación civil Bajo la Lupa llevó a cabo un seminario homenaje al doctor Leandro Despouy. Durante el evento, que se realizó de forma virtual, se abordó desde la importancia de su figura en la transparencia y el control público hasta la trayectoria e influencia que tuvo el ex titular de Auditoría General de la Nación (AGN) en relación a los Derechos Humanos tanto en el plano nacional como internacional.

Despouy tuvo un trabajo destacado en las áreas que le tocó ejercer dentro de la Auditoría. Entre sus hitos, fue pionero en promover el vínculo entre el organismo con las organizaciones de la sociedad civil. Se incorporó en 2002 y fomentó publicaciones para la ciudadanía, y sesiones abiertas y públicas del colegio de auditores para los ciudadanos y el periodismo.

El diputado nacional José Riccardo acentúo la simpleza y generosidad que tenía Despouy en todas sus acciones políticas. “Estaba atravesado por esta convicción, tratar de explicarle al ciudadano en palabras sencillas, la importancia de la transparencia, el control y el efecto concreto que tiene en la vida de la población, en la salud, la seguridad y en el bienestar del país”, agregó.

"En cada espacio, en cada rol que le tocó estar a Leandro Despouy, siempre ha prestigiado esos lugares. No quedan dudas".

Con su accionar, Despouy supo visibilizar el trabajo técnico, profesional que muchas veces ha sido silencioso, que es el trabajo de Auditoría General de la Nación. Jesús Rodríguez, presidente del organismo, lo definió como un trabajador de múltiples y variadas acciones en distintos campos.

“El control, la transparencia y la rendición de cuentas, son activos indispensables para la efectiva vigencia de los Derechos humanos”, acentuó el titular de AGN.

Por su parte, la diputada nacional Carla Pitiot añadió: “En cada espacio, en cada rol que le tocó estar a Leandro Despouy, siempre ha prestigiado esos lugares. No quedan dudas. Desde cualquier aspecto o lugar que abordemos, él ha prestigiado todos los sectores que ha ocupado”.

Su relación con los Derechos Humanos 

Despouy fue víctima de las violaciones a los Derechos Humanos. También perseguido por la Alianza Anticomunista Argentina desde 1974 y se exilió en Francia. Allí movilizó las primeras denuncias al tribunal de Russell, las violaciones de la Triple A, las persecuciones políticas y los asesinatos de las dictaduras militares, no solo de Argentina, sino en gran parte de América Latina. 

“Todavía recuerdo su compromiso con la búsqueda de justicia en casos de crímenes contra la humanidad cometidos por la Triple A, que no dejó de promover aun cuando él ya estaba inmerso en otros conflictos. Esto demuestra el compromiso por el que luchó”, remarcó el doctor Manuel Garrido, presidente de Innocence Project Argentina.

Durante el mandato del ex presidente Raúl Alfonsín y con la vuelta de la democracia, Despouy trabajó como director de la Cancillería Argentina. “Desde ese lugar, su trabajo fue clave para traer al país víctimas de represión ilegal, que estaban exiliadas, y que puedan declarar como testigo en los juicios a las juntas”, señaló Mariela Belski, directora ejecutiva de Amnistía Internacional. 

"Su trabajo fue clave para traer al país víctimas de represión ilegal, que estaban exiliadas, y que puedan declarar como testigo en los juicios a las juntas".

En el juicio a las juntas militares colaboró con la fiscalía y logró, en un hecho inédito en Naciones Unidas. “Se entregaron a la fiscalía la documentación que contenía miles de denuncias que habían llegado desde Ginebra y también las respuestas que el mismo gobierno de facto mandaba”, afirmó la doctora María Teresa Flores.

Asimismo, Despouy mantuvo relación con el Partido Socialista Francés que lo llevó a ejercer funciones de asesor en el parlamento. Tuvo gran participación, que pocas veces se dio en alguien que no era un nativo francés. Por otro lado, estuvo presente en la comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas.

El embajador Jaime Sergio Cerdá mencionó que en la comisión de Derechos Humanos estuvo el presidente de Francia Jacques Chirac y que Leandro Despouy le dijo al mandatario que, antes de tomar la palabra, era gracias a Francia que podía hacerlo. Durante los años difíciles entre los 70’ y 80’, él recibió protección del país europeo.