La recesión económica de los años anteriores afectó de forma significativa al sector cultural. Hoy esta crisis se profundiza con la pandemia. Desde el 20 de marzo las actividades culturales están paralizadas. Con subsidios y algunas iniciativas, las autoridades nacionales, provinciales y de la Ciudad de Buenos Aires intentan proteger nuestro acervo cultural.

Pero, ¿por qué es fundamental sostener al sector cultural? José Miguel Onaindia, abogado especializado en derechos culturales, hizo hincapié en la cultura como Derecho Humano. “La creación artística y la actividad en esta rama es un campo en el que se ejercen DDHH esenciales reconocidos en pactos internacionales. Por lo tanto, hay una obligatoriedad para los Estados de apoyarla. Por otro lado, es un modo de singularizar a las comunidades. Les da los valores y elementos identificatorios. Hay una paleta de expresiones muy vasta que tienen que ser protegidas”, remarcó.

José Miguel Onaindia, abogado especializado en derechos culturales, hizo hincapié en la cultura como Derecho Humano.

El capital que produce este sector es amplio, “las industrias culturales son de gran producción de riqueza, tanto simbólica como material: audiovisual, fotografía, cine, libros. Es un sector que en la sociedad contemporánea tiene un elemento preponderante porque genera mucho empleo; no solo el directo que es calificativo sino también muchas actividades indirectas. Asimismo, es un elemento fundamental para las relaciones internacionales. Por lo tanto hay múltiples intereses por parte del Estado en apoyar la cultura de un país”, enfatizó Onaindia.

El sector cultural intenta enfrentar la crisis con ayudas y subsidios

En Argentina la cultura genera 300 mil puestos de trabajo que equivalen al 1,8% del total de la economía, un porcentaje mayor a sectores como el minero o el energético. Estas cifras se desprenden del Sistema de Información de Cultura Argentina (SInCA), que actualmente trabaja en la medición de los impactos del Covid-19 en el sector en los países miembros del Mercosur. “Estamos en una instancia de planificación”, anunciaron integrantes del SInCa, quienes se preparan para llevar adelante una de las encuestas culturales más grandes en mucho tiempo.

En este contexto tan particular que está atravesando Argentina, y el mundo, existen diferentes instrumentos que intentan atender las necesidades de cada sector. A nivel nacional, desde el Fondo Nacional de las Artes, lanzaron la Beca Sostener Cultura a principios de mayo, dirigida a artistas en situación de vulnerabilidad con el objetivo de mitigar los efectos económicos y sociales causados por el coronavirus. El monto destinado es de $ 20.000 a cada becario. Otra de las iniciativas que surgió fue la Convocatoria de Fomento Solidario del Instituto Nacional de la Música (INAMU), con un subsidio de $ 10.000.

El rubro de la música es uno de los afectados

Alejandra Belinky vive en Roldán, en la provincia de Santa Fe. Es cantante lírica y tiene cinco hijos. Su sueldo dependía de clases particulares y ahora desapareció. “Ya veníamos arrastrando una crisis económica en el sector. Muchos alumnos no podían pagar y con el Covid-19 empeoró. Quedé en cero con una familia numerosa. Esta beca no me cambia la situación, pero me resulta de gran ayuda”, expresó.

Sin poder dar clases, hacer recitales, producir música y grabar en estudios, entre otras cosas, “el panorama se vuelve complejo. El rubro de la música es uno de los afectados. Pero también es cierto que la pandemia nos encuentra con muchas asociaciones. No es lo mismo estar dispersos que tener una red de contención”, comentó Diego Boris, presidente del INAMU. Del programa, que se realizó en dos veces, participaron 3600 personas y 1680 fueron beneficiadas. “Mas de 1200 músicos quedaron afuera, pero estamos tratando de conseguir esos recursos”, agregó Boris.

Entre otros proyectos para paliar la crisis, se ofrecen desde AFIP créditos a Tasa cero para monotributistas o empleadores para el pago de salarios. El Fondo Desarrollar es otro de los que salió recientemente, dirigido a espacios culturales con ayudas que van desde los $100 mil a los $200 mil, estas líneas de fomento se vuelven cruciales para evitar su cierre. 

Según Dolores Casares, a estos lugares se les presenta un desafío: “El panorama de las galerías y espacios de artes es muy complicado. Muchas viven de la venta de obras y eso ahora está totalmente parado. Otras, se mantienen por visibilizar sus actividades, entonces la pregunta es ¿cómo nos adaptamos y qué va a pasar?”. Casares coordina espacios culturales, es artista y curadora en el Centro Creativo el Obrador.

El sector cultural intenta enfrentar la crisis con ayudas y subsidios

Para el sostén de salas de teatro y espacios escénicos, el Instituto Nacional del Teatro lanzó el Plan Podestá. “Es un apoyo por la situación de emergencia para salas, catálogos y elencos que ya recibieron subsidios previamente del Instituto. En primer instancia se consideró a los lugares físicos. Los pagos a grupos vienen lentos pero están asignados y aprobados”, informó Carola Parra, productora de artes escénicas. Para organizaciones culturales no tan comerciales como los teatros, existe Puntos de Cultura, que busca acompañar a colectivos que desarrollan proyectos comunitarios.

No solo teatro y música fueron contemplados. También se lanzaron algunas líneas de ayuda al mundo del cine y a las bibliotecas populares. Por su parte desde el INCAA promovieron dos programas: uno para la presentación de costos online y el otro para Estrenos en CINE.AR. Ariel Martinez Herrera es el director de Tóxico, una película rodada en 2017, que se estrenó en mayo por dicha plataforma, que también está disponible en aplicación móvil. "Se accede de manera gratis a los contenidos del cine nacional: películas, series, documentales, tv. Los estrenos salen 30 pesos, igual que la entrada al Cine Gaumont, y está disponible para verla por 48 horas”.

Desde hace 15 años la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP) lleva adelante el Programa Libro% en el que alrededor de mil bibliotecas populares compran libros para sus lectores anualmente. Este año, y por primera vez en la historia, con la suspensión de la Feria del Libro Internacional de Buenos Aires, la iniciativa se realiza de forma virtual.

“Armamos un portal que relaciona bibliotecas con editoriales, un protocolo de compras y entrega de los libros, está funcionando bien, con algunos problemas que vamos resolviendo. Prorrogamos la duración hasta el 5 de junio”, aseveró Maria del Carmen Bianchi, presidenta de CONABIP. En Argentina hay más de 2 mil bibliotecas populares, de las cuales 1300 están registradas y unas mil participaron del programa.

En la Ciudad de Buenos Aires el Fondo Metropolitano de la Cultura, las Artes y la Ciencia, para espacios, artistas y gestores con domicilio en CABA. Los montos van desde los $ 50 a los $360 mil pesos. Desde el área de prensa del Ministerio de Cultura porteño comentaron a este medio las acciones que están tomando. “Reforzamos otros subsidios, lanzamos la web Cultura en Casa donde subimos contenido todos los días, desde óperas del Colón a obras del Teatro San Martín. También hicimos puentes culturales, intercambios con provincias y ciudades del mundo”, informaron.

Artículo realizado en colaboración con el equipo del Centro Creativo El Obrador.