Rossana Franco es la Defensora de Niños, Niñas y Adolescentes de la provincia de Misiones desde 2022 hasta 2027. El organismo es el segundo creado a nivel nacional para la protección de los más chicos. El Auditor.info dialogó con la representante en el marco de la serie de entrevistas Defensores de la Argentina.

- ¿Desde cuándo existe la Defensoría de Niñas, Niños y Adolescentes en Misiones y cómo es que funciona?

La Defensoría existe desde el año 2012 y yo estoy a cargo desde mayo del 2022. Es fundamental en nuestra provincia, ya que somos parte del sistema de protección integral con la Ley 26.061 que nos parece muy importante. Fue creada por Ley en el año 2010, a través de la Ley IV-N° 52. Somos la segunda Defensoría de Niñas, Niños y Adolescentes del país: la primera es Córdoba y la Nacional vino después.

Lo que hacemos es controlar si realmente están garantizados los derechos.

Uno de los artículos fundamentales de nuestra Ley es garantizar y promover los derechos, y a partir de ahí se dan todos los programas que llevamos adelante. Tenemos la gran tarea de controlar a todas las instituciones, tanto públicas como privadas, donde asisten niños. Lo que hacemos es controlar si realmente están garantizados los derechos de quienes están asistiendo a los dispositivos de cuidados alternativos, que están destinados a niños, niñas y adolescentes que se han quedado sin los cuidados parentales, de los cuales los casos son judicializados. En este sentido, trabajamos con la justicia y con todo el sistema de protección integral de la provincia.

Además, hemos armado una mesa de niñez con organizaciones de la comunidad, como así también las áreas de desarrollo social, derecho humano y educación. Una de las actividades que realizamos con la mesa es el mes de la niñez, que lo hacemos en agosto con un programa que se llama explorando tus derechos. En mi primer año de gestión tomamos el derecho al juego y el segundo el derecho de ser escuchado. Este año vamos a trabajar el derecho a vivir en familia y a una vida sin violencia. Estas son algunas de nuestras actividades.

Por otro lado, trabajamos con la Ley II 41 que es, con su anexo, la Ley nacional Lucio (27.709), con los diferentes poderes del Estado. Ya hemos empezado a capacitar a la Policía de la Provincia. Ahora estamos trabajando para la capacitación de manera virtual, para que puedan acceder todos los agentes del Estado provincial y de los tres poderes, tanto Legislativo, Judicial y Ejecutivo, a través de distintas plataformas.

Asimismo, tenemos un programa que se denomina Promotores y Formadores de Derecho con el que vamos a estar trabajando con los niños, niñas y adolescentes.

- La Defensoría es el órgano de aplicación de la Ley de acogimiento familiar, ¿Cuáles son sus tareas?

Somos una de las únicas provincias que cuenta con una ley al respecto. En nuestro caso es una ley provincial donde buscamos que los niños no estén institucionalizados. Estamos llevando una gran tarea en ese sentido. Estar en familia, pero no desde la institucionalización. Hay que tener mucho amor para recibir un niño y más amor para saber soltar, sabiendo que siempre van a formar parte de esa familia ampliada.

Hay que tener mucho amor para recibir un niño y más amor para saber soltar.

Actualmente tenemos 28 familias que están acompañando nuestro sistema. El acogimiento es temporal, de seis meses. Es un programa que nos sensibiliza un montón, hay muchas familias que quieren colaborar y hay un proceso por el cual deben pasar son varios requisitos: no estar en el Registro de Familias Adoptantes, no tener antecedentes penales, no ser Deudores Alimentarios, tienen que tener su informe psicológico y un informe socioambiental. Además, desde el equipo de acogimiento familiar se hace la visita domiciliaria, se prepara a todos los integrantes, porque se arma una nueva familia por seis meses, así que es un programa muy sensible para nosotros.

Arrancamos el año pasado y hoy tenemos seis acogimientos, pero ya han pasado 20 acogimientos familiares. Hay familias que esperan un tiempo, porque también tienen su proceso para el desapego. Es una tarea compleja, por eso el acompañamiento y la capacitación son fundamentales.

- En materia de prevención de abusos, ¿Qué actividades realizan?

Desde mayo decidimos también tomar como política las cuestiones vinculadas a la prevención y atención del abuso contra niños, niñas y adolescentes. Creamos un protocolo provincial de intervención en situaciones de abuso, donde colaboraron más de 100 profesionales de toda la provincia y hoy está a disposición de la ciudadanía. Nos parece fundamental saber qué hacer ante una situación de abuso, pero también cómo prevenirlo. Eso es lo que busca ese material, que comenzó a gestarse en pandemia, de manera virtual y fue una experiencia muy enriquecedora, con muchos profesionales comprometidos en esta lucha en contra de las violencias y en empezar a entender que el abuso sexual es un delito y que hay que denunciarlo. 

- ¿De qué consta la campaña Unidos?

La campaña tiene varios hashtags como #yotambiénsoydefensora #Somosdefensores y #Soydefensor con lo que buscamos que la sociedad se apodere de eso, pero que también sepa poder identificar cuando hay un derecho que está siendo vulnerado, poder reconocerlo y actuar conociendo todas las herramientas con las que contamos en Misiones. ¿Qué herramientas tenemos de protección? La Línea 911, la 137 de provincia que es el programa las víctimas contra las violencias que está las 24 horas, la línea 102 que es la voz de los niños las 24 horas.

En esta línea, desde el poder judicial se lanzó un WhatsApp y un correo que se denomina "contame" para hablar de todas las cuestiones que tengan que ver con el abuso. Por otro lado, desde la Defensoría tenemos la app "Yo cuento" donde buscamos que el acceso de manera digital esté a disposición de nuestros menores y que puedan acceder a través de los dispositivos. Buscamos brindar una herramienta más para que conozcan y sepan si sus derechos están siendo vulnerados o han sido víctimas de algún tipo de violencia.

- ¿Qué tipo de denuncias o reclamos reciben?

Nos llegan situaciones de las escuelas, situaciones de violencia por ejemplo, y nosotros articulamos con las direcciones de niñez de la provincia. Tenemos 49 direcciones y, donde no las hay, se trabaja con las áreas de acción social. Articulamos con esas áreas porque son el órgano de aplicación del sistema de protección integral de los derechos de niños, niñas y adolescentes en su municipio, que se crearon hace dos años y medio a partir de la modificación de la ley de los municipios.

Desde la Defensoría lo que hacemos es equipar y se capacitan a las direcciones. Se va haciendo todo el acompañamiento. Lo que buscamos es que todas las políticas de niñez, provinciales y nacionales se puedan trabajar a través de esas direcciones y que lleguen realmente a los municipios. Ahora estamos trabajando en un diagnóstico para conocer más las situaciones de violencia en cada uno de los municipios. De la Defensoría también depende el Observatorio de Políticas de Niñez, la idea es poder tener estadísticas y diseñar políticas públicas que impacten en la comunidad.

También nos llegan situaciones de abuso, de violencia y de bullying. Asimismo notamos que, por la situación económica, la crisis que está afectando a toda la sociedad hace que haya más abandono escolar. Esto también lo estamos abordando. En la mayoría de las situaciones se da por falta de recursos. Estamos haciendo un acompañamiento en este sentido porque el derecho a la educación es fundamental.

- Se cumplieron 15 años sin Defensor del Pueblo de Nación ¿Por qué te parece importante que se designe este rol?

Me parece fundamental porque una de las funciones primordiales de un defensor es ser el órgano de contralor, que es la última instancia donde llega un ciudadano con una problemática, que en la mayoría de los casos son sociales y creo que siempre hay que estar al lado de las personas, al lado de la gente para encontrar los mecanismos de resolución de los conflictos. Eso es crucial, poder hacer todo ese acompañamiento. Los defensores estamos justamente para defender y garantizar los derechos de las personas, tenemos que estar ahí sosteniendo, protegiendo y no soltando la mano.