“El balance de estos 25 años refleja un organismo fortalecido”
La presidenta del principal órgano de control porteño, Mariana Inés Gagliardi, aseguró que uno de los logros más destacables fue poner al día los informes que van desde 2019 hasta 2022, gracias a la implementación de una estrategia integral de profesionalización.
En 2024, la Auditoría General de la Ciudad de Buenos Aires celebró sus 25 años de vida. Para conocer en profundidad el presente del organismo y analizar el camino recorrido en materia de control, El Auditor.info dialogó con su presidenta, la abogada Mariana Inés Gagliardi.
- ¿Cuál es el balance sobre la tarea de control ejercida en este cuarto de siglo?
El balance de estos 25 años refleja un organismo fortalecido, con avances significativos en los últimos años. Uno de los logros más destacables ha sido poner al día los informes de auditoría, culminando los períodos que van de 2019 a 2022, y avanzar con solidez en los ejercicios de 2023, 2024 y el actual. Hoy podemos afirmar con satisfacción que la AGCBA tiene su labor al día, un hito que fortalece la transparencia y la rendición de cuentas en la gestión pública.
- ¿Cómo se logró este objetivo?
Ha sido posible gracias a una estrategia integral de profesionalización. En 2024, implementamos el Plan Integral de Capacitación en Control Gubernamental y el Ciclo Orientado de Auditoría, enfocados en mejorar las competencias técnicas de nuestros equipos en áreas clave: desempeño institucional, marco legal, finanzas, contabilidad y administración pública. La formación continua es un pilar irrenunciable para un organismo de control, especialmente en un contexto de transformaciones tecnológicas y demandas sociales crecientes.
Paralelamente, actualizamos la normativa interna para alinearnos con los estándares nacionales e internacionales de control externo y aprobamos una nueva estructura organizativa, diseñada para optimizar los equipos de trabajo y elevar la eficiencia en la fiscalización de políticas públicas. La AGCBA no solo vela por el cumplimiento normativo, sino también por el impacto concreto de las políticas en la ciudadanía, un principio que guía estas reformas.
En síntesis, el balance es positivo, aunque reconocemos que queda camino por recorrer. Estamos comprometidos con seguir mejorando, siempre con la convicción de que avanzamos en la dirección correcta.
- ¿Qué informes se pueden destacar por sus observaciones entre los últimos que aprobaron?
Hemos llevado adelante numerosos informes que han permitido mejorar sustancialmente la gestión pública. Si tuviera que destacar algunos informes particularmente relevantes, mencionaré dos que han tenido observaciones relevantes.
La primera es nuestra auditoría al Programa “A la Par”, un programa fundamental de acompañamiento a personas embarazadas y familias durante los primeros meses de vida del bebé. Lamentablemente, encontramos que contaba con un presupuesto claramente insuficiente: de los $269.904 asignados en 2023, solo se ejecutaron $145.376, y presentaba graves deficiencias en su implementación. Lo más preocupante era que no se realizaban las visitas domiciliarias, que son el corazón mismo del programa. Este informe permitió visibilizar esas falencias y hoy estamos trabajando para que se asignen los recursos necesarios y se cumpla con lo establecido.
Otro caso emblemático fue la auditoría al Servicio de Elaboración y Distribución de Comidas para Efectores Propios. Aquí detectamos que el 50% de las empresas adjudicatarias no cumplían con los controles mensuales de alimentos y ninguna realizaba los análisis de laboratorio requeridos. Situaciones como estas, donde se pone en riesgo la calidad de la alimentación que reciben poblaciones vulnerables, requieren una intervención inmediata. Nuestro informe permitió reorientar estos servicios y fortalecer los mecanismos de control.
- ¿Cómo se dio la incorporación de nuevas tecnologías al trabajo de la AGCBA?
La pandemia aceleró la necesidad de modernizar nuestros procesos. En 2021, dimos un paso decisivo con la implementación del Sistema de Expedientes Electrónicos (GDE-SADE), una herramienta clave para agilizar la interoperabilidad con los organismos auditados y garantizar un flujo de información más eficiente.
Esta plataforma no solo eliminó la dependencia del papel, sino que también centralizó y digitalizó la gestión documental, reduciendo tiempos de búsqueda y procesamiento. Además, fortaleció la transparencia y trazabilidad de nuestros actos, ya que cada acción queda registrada de manera accesible y verificable.
La digitalización ha sido un cambio estructural para la AGCBA: hoy operamos con mayor agilidad, responsabilidad y alineación a los estándares de rendición de cuentas que exigen los ciudadanos.
- ¿Qué objetivos a mediano o largo plazo aparecen en la mira?
Uno de los principales objetivos a mediano y largo plazo es fortalecer la articulación con la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. La sinergia entre ambos organismos es clave para potenciar el impacto de los informes de auditoría y garantizar que sus recomendaciones sean tenidas en cuenta en la toma de decisiones políticas. Para esto, se buscará generar instancias de diálogo más fluidas, mejorar los mecanismos de seguimiento de las observaciones realizadas en los informes y trabajar en conjunto en la formulación de estrategias de control más efectivas.
En paralelo, nos hemos propuesto aumentar significativamente la producción de informes de auditoría, pero sin perder de vista que la calidad y la profundidad de los análisis son igual de importantes que la cantidad. Queremos auditar más, sí; pero también, mejor: incorporando metodologías innovadoras, evaluando no solo el cumplimiento normativo, sino también el impacto social de las políticas y optimizando los tiempos de trabajo para ser más eficientes.
Por otra parte, se proyecta una serie de acciones clave para este año que permitan consolidar los avances logrados hasta el momento. Se pondrá especial énfasis en la optimización de los procesos internos, el fortalecimiento del control del impacto de las políticas públicas y la modernización continua de la estructura organizativa. La meta es que la AGCBA cumpla con su función de control, pero que también se convierta en un referente en materia de evaluación de políticas públicas y rendición de cuentas.
- ¿Cómo será la organización interna del organismo para afrontar esos desafíos?
Nuestro equipo es central en este proceso. Proyectamos un incremento del 20% en capacitaciones, con formación continua en control gubernamental, finanzas, tecnologías y auditorías de desempeño, porque un organismo de control sólido requiere profesionales actualizados, capaces de adaptarse a los retos de una gestión pública en transformación. Esta apuesta por la formación continua no solo refuerza las habilidades individuales, sino que fortalece el trabajo en equipo, impulsando la colaboración y la eficiencia. En definitiva, ayuda a aumentar la producción de nuestros informes y a cumplir con la planificación anual establecida por el Colegio de Auditores y Auditoras.