El año pasado, la AGN se abstuvo de opinar sobre tres balances de Yacyretá
Corresponden a los dos semestres de 2018 y al último de 2017. Las opiniones se fundaron en la indefinición de cuestiones como las condiciones de las tarifas y las compensaciones por territorios inundados. El resultado se dio en el 18% de los informes financieros que aprobó el organismo de control.
Durante 2019, la Auditoría General de la Nación (AGN) aprobó 39 estados financieros, dedicados a analizar la razonabilidad de los números de entes y empresas públicas.
La particularidad de la performance es que tres de esos trabajos, dedicados a la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), obtuvieron el mismo resultado: abstención de opinión.
Los relevamientos en cuestión corresponden a los dos semestres del ejercicio 2018 y al segundo de 2017. Entre los motivos que llevaron a la AGN a otorgar la que es, en rigor, la peor calificación para un balance, se destacan la falta de definiciones en cuestiones como las condiciones aplicables a las tarifas, la deuda de la EBY con el Gobierno argentino, la compensación por territorio inundado y la integración del capital de la empresa.
De un repaso somero por el archivo de la Auditoría, puede advertirse que el mismo resultado se obtuvo en los dos informes sobre Yacyretá aprobados en 2018, en los que se analizaron los balances del primer semestre de 2017 y el segundo de 2016.
Y en 2017 pasó lo mismo con los estados financieros del primer semestre de 2016, y un año antes se repitieron los diagnósticos para los balances de 2015 y 2014.
No obstante, la EBY no fue la única dependencia que el año pasado se llevó abstenciones de opinión. Algo parecido ocurrió con los estados contables de Fabricaciones Militares correspondientes a los ejercicios 2015 y 2014.
En ambos casos, la calificación está relacionada, entre otras cuestiones, a que los balances del organismo fueron elaborados con reglas que no se ajustan a la normativa contable profesional.
Asimismo, y como ya ocurrió en otros años, sigue habiendo falencias en la valuación de las actuaciones (juicios) por los siniestros ocurridos en el año 1995 en la Fábrica Militar Río Tercero.
Y, del relevamiento de bienes de uso, surgen inmuebles sin escritura traslativa de dominio, algunos cuya titularidad está en litigio y otros con valuación incierta.
Los balances del PAMI hablan de errores en el registro de juicios en su contra.
Para completar, hay un estado contable del PAMI que también obtuvo abstención de opinión. Es el que analizó los números del segundo semestre de 2015, período en el que se alertó por la falta de confiabilidad del sistema informático, que incluye el padrón de afiliados, el registro de prestadores y la liquidación de pago a proveedores.
Además, el trabajo remarcó que la obra social de los jubilados no procesa ni controla las liquidaciones por compras de medicamentos a costo fijo, dejando que esos chequeos los haga el mismo proveedor, a través de una empresa subsidiaria.
Y por último, se destaca que la previsión de juicios que afronta el organismo presenta errores significativos, por ejemplo en los cálculos de intereses, la existencia de juicios duplicados y causas que aún figuran en carpeta, a pesar de estar concluidas.
El año de la Auditoría
En términos generales, la AGN aprobó 139 informes financieros, que representan dos tercios del total de exámenes producidos durante 2019.
A su vez, de esos trabajos, 82 correspondieron a balances y 57 a préstamos multilaterales.
En esta última categoría, 49 lograron dictamen favorable, que es la mejor calificación posible, y no hubo abstenciones de opinión.
En la próxima entrega, se analizará los tiempos que demoró el organismo de control en aprobar la otra categoría de los informes que realiza: las auditorías de gestión.