Además de los subsidios, aumentos
Publicado: 02-12-2011
Los aumentos tarifarios en los servicios públicos esenciales -que el subsecretario Roberto Baratta y los ministros Julio De Vido y Amado Boudou estuvieron negando sistemáticamente- han comenzado a salir a flote con las medidas adoptadas por los entes reguladores.
Tal como informó Clarín, el desmantelamiento de los subsidios residenciales viene acompañado de fuertes subas en las tarifas de gas, luz y el servicio que presta la estatal AySA.
Esos incrementos en las estructuras tarifarias -que oscilan entre el 34% y el 248%- reflejan los costos reales de cada servicio y los primeros en sentirlos serán los clientes hogareños que perdieron los subsidios por decisión del Gobierno o por haber renunciado voluntariamente a los mismos.
Junto con el formulario que deberán responder los que soliciten la continuidad de los subsidios, el Enargas -por medio de la resolución 1993- le ordenó a las distribuidoras que le facturen desde enero a todos los usuarios residenciales los nuevos valores del cargo tarifario de importación de gas.
Con la medida de ayer, el ente regulador puso en práctica las modificaciones que había dispuesto a principios de noviembre por medio de la resolución 1982 y que recayeron sobre uno de los componentes "variables" de la tarifa: el cargo específico que fue creado en 2008 para afrontar los suministros externos de gas.
Los cambios consistieron en:
La extensión del cargo a todos los usuarios de bajos y medianos consumos que estaban excluidos.
Los hogares de la región metropolitana con consumos de hasta 1.000 metros cúbicos anuales que no estaban alcanzados ahora tendrán un adicional por cada metro cúbico consumido que oscila entre $ 0.087 y $ 0.131.
Una suba de hasta el 248% en el valor del cargo para los clientes de medianos y altos consumos que ya lo venían pagando. Para los consumos que van de 1.000 a 1.250 metros cúbicos anuales, el cargo saltó de $0,050 a $ 0,174. Y para los consumen más de 1.800 metros cúbicos anuales, el valor pasó de $0,270 a $0,940.
En el servicio eléctrico, el nuevo cuadro tarifario que tiene en la gateras el ente regulador registra aumentos de hasta el 34% en el precio de la energía sin subsidios.
Según le anticipó el ENRE a Edenor y Edesur, el valor del kWh sin subsidio para los que consumen hasta 300 kWh bimestrales aumenta 29%, al pasar de 0, 31 a 0,40 pesos. El incremento más alto será del 34% y corresponderá a los que demandan entre 301 y 650 kWh por bimestre: el kWh subirá de $ 0,27 a $0,37. Para los pequeños y medianos comercios, la suba será entre el 23% y 26%.
En tanto, en el caso AySA lo que se aplicó fue un ajuste del 210% promedio en el llamado "factor K" de la tarifa para compensar lo que hasta ahora se venía consignando en las boletas como "subsidio del Estado".
Para la mayoría de los usuarios residenciales, el doble impacto de la subas tarifarias y la eliminación de los subsidios será, por ahora, meramente testimonial.
Seguirán pagando, por igual consumo, las mismas sumas que desembolsan en la actualidad.
Cuando pierdan la ayuda estatal, deberán afrontar las tarifas plenas sin subsidios que implicarán aumentos del 150% al 350% en las facturas finales.