Publicado: 01-09-2011

Río Negro.- El Tribunal de Cuentas condenó al secretario de Economía por el desvío de $ 550 mil. La irregularidad incumple lo establecido en el artículo 59 de la Carta Orgánica Municipal.

El órgano de contralor desestimó la apelación que presentó el funcionario. El órgano de contralor de la Municipalidad local condenó al secretario de Hacienda, Juan José Deco, a pagar 2 mil pesos, por el desvío de fondos con destino específico durante el ejercicio 2010, por un monto de 550 mil pesos.

Los integrantes del Tribunal entendieron que el funcionario desconoció las reglamentaciones vigentes, previstas en la Carta Orgánica Municipal, por lo que dispuso la sentencia a través de un dictamen rubricado en las últimas horas. Los fondos estaban destinados a tareas de regularización dominial en distintos barrios en los que hubo ocupaciones, aunque la Municipalidad los habría utilizado para cubrir cuentas bancarias afectadas por el descubierto financiero.

La irregularidad reside en que, al cierre del ejercicio 2010, el monto mencionado no fue reintegrado en la cuenta específica.

El expediente comenzó en febrero de este año, tras lo cual se realizó el proceso administrativo habitual, dentro del cual el titular de la cartera de Hacienda efectuó su descargo, el cual fue desestimado por el órgano de control.

En su argumentación, el Tribunal menciona que el funcionario argumentó que la transacción de fondos a bonos Lombard se efectuó el 29 de diciembre, con el objeto de cubrir la cuenta específica, aunque la prueba "no es real, ya que dicha operación se concretó el 14 de febrero de este año", es decir, una vez que venció el plazo para poder realizarla.

En cambio, a través del análisis de la situación, el Tribunal detectó que los 550 mil pesos, destinados a un fin específico, estaban acreditados en la cuenta general del banco Patagonia al cierre del ejercicio 2010, y no en bonos Lombard, como argumentó Deco.

El accionar de Deco, a entender del Tribunal de Cuentas, afecta el desembarco de otros fondos con destino específico debido a que es obligación remitir los comprobantes correspondientes del uso que tuvo el dinero, lo que nunca se concretó.

El secretario de Economía "estaba en pleno conocimiento que los fondos transferidos tenían un destino específico, y que existía una intimación por falta de rendición de los mismos, por lo que la transferencia concretada el 29 de diciembre de 2010 se efectuó por fuera de normas, transgrediendo lo fijado en el reglamento de contabilidad, aprobado por Ordenanza 669 - CM- 91".