Publicado: 24-08-2011 
  
Tierra del Fuego.- El legislador Manuel Raimbault deslizó dos posibilidades ante la falta de solución del gobierno a la provisión de agua: o bien se debe a la ineficiencia de los funcionarios, o bien a un problema más grave, que vinculó con corrupción en la gestión. El parlamentario pidió la intervención del Tribunal de Cuentas y no descarta acciones judiciales, para saber qué ocurre realmente detrás del telón oficial. Sostuvo que es hora de atribuir responsabilidades. Por su parte el secretario de Comunicación Institucional Silvio Bocchicchio, dio a conocer el lanzamiento de una "herramienta financiera a través del Banco, para los vecinos que tienen falta de recursos, a fin de que puedan instalar un tanque de reserva de agua en sus viviendas.

"La verdad que la información de hoy genera algún dato de irritabilidad adicional, porque la posibilidad de que los ministros en una reunión en el parlamento vayan simplemente a mentir, no deja de ser muy significativo de toda esta situación", dijo ayer el legislador Manuel Raimbault por Radio Nacional Ushuaia, luego de conocerse un informe que asegura que el gobierno sabía de la situación desde hace más de un año y medio.

Asumió como una "mentira" las manifestaciones de los ministros la semana pasada en la reunión de la comisión 3, cuando negaban estar al tanto y haber recibido pedidos de fondos para resolver el problema, pero fue más allá: "Por ahí hacemos mal en quedarnos en la anécdota de si mintió o no mintió el ministro, pero es significativo para este tema. Hoy lo que tienen que hacer los ministros es enviar el plan de contingencia. Decir cómo, cuánto y cuándo va a demorar la resolución de este tema. Ojalá se haga de la mejor manera posible. No conozco el contenido de los proyectos de ley, pero no me parece que sea una buena solución, después de un mes y medio, copiar un proyecto de ley que ya está. No tenemos ningún problema en acompañar las soluciones que parezcan más adecuadas, pero debieran resolver inmediatamente esta cuestión", dijo cuando todavía no se conocía que en vez del plan de contingencia, el gobierno iba a insistir con la declaración de la emergencia.

"Estas postergaciones, esta no visibilización del problema que tenían en ciernes desde el 2010, significa lo que vemos hace un tiempo: que el gobierno no agenda este tema como un problema a resolver, y precisamente por eso no lo resolvió. Para el gobierno no ha sido un problema el tema del agua potable y tampoco era un problema hace cinco o diez días. Esto se manifestó claramente en la Legislatura: el ministro de Obras Públicas dijo hace una semana que no era un problema el suministro de agua potable, y lo más inquietante es saber si el gobierno agenda que tiene un problema para resolver", sentó como inquietud.


Las contramarchas

Consultado sobre el proyecto que estaba listo para presentar ante el ENHOSA, que finalmente no se presentó, siendo un organismo que subsidia obras de infraestructura y al que había concurrido Benegas acompañado por Rosana Bertone, Raimbault concedió que se pueden hacer "muchas especulaciones" vinculadas con los motivos de esta decisión.

Volvió al "dato objetivo" en esta cuestión: que hay barrios que hace tres días no tienen agua. Ya no importa cuál fue el motivo. Hay que empezar a trabajar en la atribución de responsabilidad. No importa si mintieron, especularon, trabaron, obstaculizaron, subejecutaron partidas presupuestarias. La gente no tiene agua y este nivel de falta de suministro de agua potable incide en la vida cotidiana de la gente y tiene que aumentar la extensión de responsabilidad a los funcionarios, sea personal, política, disciplinaria o penal", sentenció, dispuesto a llevar el asunto a la justicia.

"Si un gobierno se vanagloria y nos dice que tiene 70 millones de pesos que le sobraron, que tenía las licitaciones hechas y no las hizo, y las ciudades no tienen agua, la verdad hay una crisis mucho más grande que la de servicios. Es una crisis política", sostuvo.


¿Corrupción encubierta?

Además para Raimbault hay síntomas que podrían interpretarse como corrupción, detrás de este problema que no se resuelve, y entre ellos un posible desvío de fondos que debieron destinarse a obras: "La corrupción se da de muchas maneras, pero tener dinero que dicen que está bien guardado para que la gente no tenga agua, no sé si no empieza a ser un acto grave de ineficacia, que también es corrupción", señaló.

"Hay un padecimiento cotidiano de la gente, que no sé si está en consideración de algunos funcionarios. Hay padecimientos de quienes tenemos el servicio de agua potable y circunstancialmente lo tenemos en forma defectuosa, mala o irregular; y hay barrios completos de Ushuaia, de Río Grande y de Tolhuin que no tienen ningún servicio de agua potable. Lo que nos pasa a nosotros algunos días, le pasa a otros toda la vida. ¿Y cómo se explica esto en un gobierno que dice que tiene ahorrada la plata para Obras Sanitarias?", enfatizó.

Para el legislador "hay datos que empiezan a no cerrar. Hay tapas de diarios que hablan de un déficit presupuestario de 180 millones de pesos con superávit de fondos de infraestructura. Algunos datos no cierran", reiteró, y enumeró "sucesivas mentiras anecdóticas" que ha venido planteando el gobierno y que parecen "conducir a una gran mentira".

"Mintieron con los aumentos tarifarios, con la existencia de las obras, mintieron a algunos con aumentos salariales. Me parece que en el fondo el gobierno va a tener que sincerar la situación económico-financiera. ¡Qué sorprendente que el gobierno tenga 70 millones disponibles y no haya podido transferir 700 mil pesos!", exclamó, para volver a observar que "algún dato no cierra en esto".


Intervención de controles

Raimbault agregó que más allá de las dudas, decidió tomar las primeras acciones, tendientes a dejar en claro si hubo desvío de fondos o qué está ocurriendo con el dinero para obras. "Ya me presenté al Tribunal de Cuentas, pedí informaciones, porque hay que empezar a certificar si esto que están diciendo es cierto", dijo, y barajó dos posibilidades: "O hay funcionarios que están lejos de una eficiencia administrativa porque están subejecutando partidas y teniendo 70 millones de pesos no se les ocurre en qué gastar; o eso que no saben en qué gastar en realidad no lo tienen", disparó.

Indicó que "según la posibilidad que se dé, tendremos que buscar otra solución. Hay dos posibilidades, una es más grave que la otra, y a mí me empieza a llamar la atención porque con esta subejecución presupuestaria, la primera reacción que tuvo el ministro de Obras Públicas fue pedir un préstamo. ¿Cómo piden un préstamo, cuando nos dicen que tienen 70 millones libres? ?reflexionó-. Me parece que lo que ha dejado cuando se fue el agua, es que el fondo es mucho más oscuro de lo que parecía. Habrá que discutir cómo se empieza a suministrar el agua, pero el gobierno va a tener que sincerar esta situación, que es cada vez más grave. Esta falta de explicación va a conducir a que tengan que dar una explicación más grande", advirtió al gobierno.


Testigos de la mentira

Por otro lado llamó la atención de sus pares para tomar acciones y no ser cómplices de las mentiras oficiales. "Si los ministros van al Parlamento y mienten en la cara de los legisladores, hasta en la existencia de 700 mil pesos, estamos en otro escenario que es mucho más grave. Los ministros no pueden ir, mentir, decir lo que se les venga en gana y después hacer lo que quieran. O el gobierno les para el carro, u otro les tendrá que parar el carro", subrayó.

"Acá no hay agua. Este es el dato objetivo. El Estado no tiene otra posibilidad más que garantizarla. Si no la garantiza el Poder Ejecutivo ni tampoco la Legislatura, entonces la tendrá que garantizar un Juez", apuntó anticipando la posible intervención de la justicia.

Como autocrítica para la Legislatura, sostuvo que "en este estado de situación, la responsabilidad se extiende. Porque si un ministro va, nos miente, y la gente sigue sin agua y nosotros estuvimos en esa reunión, entonces tendremos que hacernos cargo. No quiero ser testigo de la mentira del ministro. O esto se resuelve, o la Legislatura tendrá que tomar otras cartas", señaló el parlamentario.


Sin responsables políticos

Asimismo, Raimbault compartió el criterio de otros referentes que consideran que deben ser removidos los ministros que han demostrado ineficiencia. "Si el ministro (Benegas) dice que teniendo los fondos no lo pudo hacer, el Poder Ejecutivo va a tener que repensar la permanencia del ministro en el cargo. En una crisis donde hace un mes y medio no tenemos agua, tendría que haber alguna responsabilidad política", reclamó, y agregó que "pudiéndolo resolver, no sólo no lo resolvieron sino que lo agravaron, porque hace un año teníamos agua".

Raimbault insistió en que puede haber una situación más grave si en realidad no están los fondos y fueron desviados a otro fin, y advirtió que "nadie a partir de ahora puede desconocer esta situación y todos están obligados a aclarar. Hay dos explicaciones que dar, si esto se podría haber resuelto y no se resolvió. Una es qué va a pasar, porque alguien tiene que responder por esto. La otra es lo que puede estar en el subterráneo de esta mentira que, quizás, sea más grave".

"Ya hemos pedido la intervención del Tribunal de Cuentas para que este posible escenario empiece a despejarse y si esto que nos dicen que es así, realmente es así. Deben intervenir los órganos de control del Estado en forma imperiosa y rápida, y ahí sí empezar a trabajar en una solución. No puede ser que el Parlamento quede relegado a ser testigo y que simplemente escuchemos cómo nos mienten. Hay que dar un paso más", reiteró Raimbault.


Diez millones mensuales sin usar

El legislador mencionó que mes a mes ingresan montos que rondan los diez millones de pesos sólo en concepto de coparticipación de retenciones a la soja, y que no hay explicación que justifique la inacción. "En una ciudad que no tiene agua, que ingresen fondos específicos para resolver la problemática y que al ministro de Obras Públicas no se le ocurra resolverlo, es incómodo explicarlo. El monto llega a diez millones de pesos en algunos meses, sólo de coparticipación de la soja, para resolver problemas de infraestructura. Hay dos supuestos: el primero es simplemente ineficacia o ineficiencia, y es objetivamente grave. Ahora hay otra situación: ¿no será que en definitiva también esto empieza a ser un dibujo?, porque a mí no me entra como explicación razonable que con 70 millones no hayan podido transferir 700 mil pesos. ¿No estará pasando otra cosa? Yo no puedo creer que eso sea una explicación posible. Por eso busco algún dato de la realidad donde pueda encontrar otra explicación, y la verdad que empiezan a aparecer numerosas circunstancias separadas, pero que conducen a que hay una explicación mayor: algunas cosas que se iban a pagar no se pagaron, algunos aumentos que se iban a dar no se dieron, algunas políticas públicas de incremento para el segundo semestre también se empiezan a postergar", repasó de las últimas noticias sobre la marcha atrás de medidas anunciadas por el gobierno.

"Uno ve que en el horizonte de este semestre muchas cosas que tenían que ver con finanzas y políticas públicas de recursos, empiezan a diferirse. ¿No será entonces que estamos ante otra situación, que no era la que se presentó en junio, de que se había estabilizado el Estado, que no había más problemas económicos, sino que eso también ha tenido algún dejo de mentira? Me parece que esta es una situación más grave. Creo que hoy, cuando el agua ha bajado y nos ha dejado el fondo, tenemos que empezar a ver otra realidad", concluyó.