Denuncia

Guido Sotelo habría librado cheques de la municipalidad para cubrir una supuesta deuda de $ 180.000 con un prestamista. Como la comuna no tenía fondos, el presunto usurero lo denunció. Investigan a un segundo prestamista.

La supuesta deuda de $ 180.000 que el intendente de San Pedro de Guasayán mantendría con un prestamista de la ciudad capital destapó un presunto hecho delictivo que está siendo investigado por la Justicia. Es que Alberto Guido Sotelo habría librado cheques de la municipalidad para cubrir la deuda, aunque el supuesto usurero no pudo recuperar el dinero y sus intereses porque la comuna no tendría fondos. El caso derivó en la Justicia del Crimen de Segunda Nominación de Choya y Guasayán ante la denuncia del prestamista, quien sería de apellido Corti. Asimismo, trascendió que un segundo usurero, de la ciudad de Fernández, estaría también reclamando por una deuda con el acusado. El jefe municipal habría contraído la deuda por las reiteradas pérdidas de dinero presuntamente en juegos de azar, a los que sería asiduo concurrente. Esto lo habría llevado a solicitar sucesivos préstamos al o a los supuestos usureros y aparentemente cubría con los cheques oficiales. Sin embargo, durante las averiguaciones del hecho denunciado por el presunto prestamista, los investigadores determinaron que Corti no mantendría ninguna relación como proveedor ni de otra índole con la Municipalidad de Guasayán y, por lo consiguiente, no brindó ningún servicio o contraprestación a la comuna que administra Sotelo como para recibir el pago con cheques oficiales. En este sentido, fuentes ligadas a la investigación indicaron que Corti sería un usurero y Sotelo un jugador empedernido, por lo que se sospecha que todo estaría ligado a dinero de sucesivos préstamos para que el intendente pudiera seguir apostando en los juegos de azar. El jefe comunal declaró en los últimos días ante la jueza Sara María Harón y habría reconocido que "sólo" le debe a Corti unos $ 60.000, aunque luego se negó a brindar más detalles ante las preguntas de los funcionarios judiciales porque sólo se trataba de una testimonial ya que, al tratarse de un intendente, no puede ser indagado porque tiene fueros. La magistrada imputó a Sotelo el supuesto delito de peculado, que el Código Penal sanciona "con dos a diez años de prisión e inhabilitación perpetua, al funcionario público que sustrajere caudales o efectos cuya administración, percepción o custodia le haya sido confiada por razón de su cargo". En tanto, Corti, luego de que se abstuviera de declarar, fue imputado del supuesto delito de defraudación en perjuicio del Estado municipal. Investigarían al segundo prestamista. Condena. Recientemente, la Sala Primera del Tribunal de Cuentas de la Provincia condenó al intendente Guido Sotelo a reintegrar al municipio la suma de $ 5.613.000 por presuntas irregularidades en el manejo de fondos públicos. A la vez, el cuerpo le impuso una multa del 10% de su sueldo, por un presunto faltante de dinero correspondiente al ejercicio del año 2006. Sin bienes. Según la investigación judicial, Sotelo no tendría bienes muebles e inmuebles a su nombre ni tampoco cuentas bancarias en ninguna entidad crediticia del país. Informe. La Justicia friense pidió al Tribunal de Cuentas de la Provincia un informe detallado de toda la gestión de Sotelo y hasta el momento recibió sólo desde 2006, por lo que reiterará el pedido de los dos mandatos (2002-2006 y 2006-2010). Fondos. La magistrada solicitó un informe al Ministerio de Gobierno de la Provincia sobre los fondos girados a la Municipalidad de Guasayán. Si ese dinero fue retirado, también se tratará de determinar qué destino se le dio. Deuda. Las autoridades judiciales determinaron la existencia de una empresa proveedora de insumos de Tucumán que inició juicios a la municipalidad por el cobro de deuda. Esto también es parte de la investigación.