Informes de auditoría, diluidos en el Congreso
Publicado: 16-11-08
Críticas a la Comisión Mixta Revisora
No importa cuán crítico sea el informe de la Auditoría General de la Nación (AGN). No importa si detecta irregularidades en algún área del Estado o desmanejos en los recursos públicos. Nada de esto importa porque los informes, al no ser vinculantes, terminan diluidos en el Congreso, tras su paso deslucido por la Comisión Mixta Revisora de Cuentas, encargada de aprobarlos o rechazarlos.
Esta comisión, que debería ser la más relevante del Congreso, pasa inadvertida incluso para el grueso de los legisladores, muchos de ellos indiferentes a la labor de la AGN.
Es que los informes de auditoría se aprueban en las sesiones como simples resoluciones -no tienen la fuerza de una ley-, no se debaten en el recinto y, al no ser vinculantes, eximen al funcionario responsable de la obligación de rendir cuentas.
Si a esto se suma el hecho de que el oficialismo ejerce la mayoría en la Comisión Mixta, el control termina no siendo eficiente, advierten la oposición y organismos no gubernamentales.
En la actualidad, quien preside la Comisión Mixta es el senador oficialista Nicolás Fernández (Santa Cruz), quien, si bien asegura haber aprobado el 90 por ciento de los dictámenes enviados por la AGN, en la oposición advierten cierta morosidad en aprobar auditorías sensibles para el Gobierno.
"La comisión no tiene toda la actividad que debería; este año, por ejemplo, no vino ningún funcionario a explicar algunas de las irregularidades detectadas por la AGN", aseguró uno de sus miembros, el diputado Alejandro Nieva (Jujuy).
Desde el oficialismo, el senador Fernández retruca: "Avanzamos en buena parte de los informes y, si hay auditorías demoradas, es porque contienen fundamentos que, a nuestro juicio, son opinables o no tienen sustento".
"La AGN debería ser un órgano técnico independiente del perfil político de la Comisión Mixta", acotó Hugo Quintana, de la Asociación del Personal de Organismos de Control (APOC).
Más allá de la polémica, lo cierto es que en el temario de la Comisión Mixta hay asuntos pendientes que generan resquemores en el oficialismo, como, por ejemplo, la auditoría sobre el pago de regalías petroleras, en la que se cuestiona a la Secretaría de Energía por utilizar una base de datos incompleta que no identifica los yacimientos y las empresas declarantes de las concesiones en explotación. También genera disputa el informe sobre la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), cuestionada por la AGN por efectuar controles de manera discrecional.