Publicado: 17-01-2010
 
En tanto por la A005, en Río Cuarto, pasan 360 transportes diarios. El jueves pasado un accidente que provocó derrame de tolueno generó preocupación y volvió a instalar el alerta en los pueblos de la zona
El triple choque acontecido antes de la medianoche del jueves sobre ruta nacional 7 -en proximidades de Vicuña Mackenna- que provocó el volcamiento de sustancias peligrosas vuelve a despertar el alerta sobre el riesgo que implica el constante paso de transportes con cargas tóxicas por la región.

Sólo en la zona de Sampacho, y según los registros que posee Defensa Civil de esta localidad -aportados por el Grupo de Seguridad Vial de Gendarmería- transcurren por la ruta 8 unos 200 camiones diarios que llevan sustancias peligrosas. En este rubro contemplan desde combustibles, fertilizantes, agroquímicos, gas propano o butano, CO2, ácidos, entre otras sustancias.

En tanto un informe difundido por PUNTAL meses atrás mencionaba que por Río Cuarto, pasan en promedio unos 360 transportes por día, es decir, unos 15 por hora, sin que se haga un control sobre éstos.

El caso más reciente ocurrió en la ruta nacional 7, a metros del peaje, tras un choque en el que intervino un camión que llevaba tolueno, un solvente altamente tóxico y explosivo que obligó a la interrupción del tránsito por varias horas ante el riego latente.

Este accidente hizo recordar algo similar acontecido un par de años atrás cuando en la ruta 7, inmediaciones de General Levalle, más el vuelco de un camión con herbicidas y pesticidas sucedido en la zona de estación Pavín sobre ruta E 86 también en ese tiempo. También en Sampacho volcó un camión con ácido sulfúrico en las afueras del pueblo y otro que llevaba glucosa lo hizo en plena zona urbana.

El alerta lanzado por los organismos de control y de Defensa Civil de las poblaciones más cercanas es el riesgo que existe que este tipo de accidentes puedan ocurrir en las travesías urbanas de las rutas que cruzan pueblos, los cuales hoy no están preparados para una emergencia ambiental.

Como para graficar la peligrosidad de este tipo de transportes, en el caso de Mackenna hubo que llamar a la brigada del Centro de Información Química para Emergencias CIQUIME situada a 380 kilómetros del sitio del accidente.

Significó la demora de varias horas, el prolongado corte de una ruta internacional, la saturación de otro camino como fue la 8 que a su vez dejó la consecuencia de otro accidente.

La mayoría de las unidades que transportan este tipo de cargas provienen de Brasil con destino a Chile, o vienen de la zona de Mendoza hacia las petroquímicas de Río Tercero y Villa María.

En un relevamiento realizado por PUNTAL en el momento del pico máximo de flujo vehicular, en la ruta 8 -a la altura de Sampacho- cada quince minutos pasa un camión con líquidos, combustibles u otro tipo de sustancias peligrosas. Lo curioso fue que algunos camiones estaban debidamente identificados sobre el producto que llevaban; otros no.

A su vez el riesgo de recurrencia de estos accidentes se potencia ante el estado de las rutas, con avanzado estado deterioro, y el tamaño de estos vehículos que con sus pesadas cargas deben circular entre decenas de baches, superar lomadas y las huellas propias que tiene el pavimento.

Datos preocupantes

En la actualidad y en ocasión de los paros agropecuarios, se dio a conocer que el 94 por ciento de los insumos de producción se transportan por camión.

El coordinador de Defensa Civil de Sampacho Fabián Rodríguez sostuvo que desde el Grupo de Seguridad Vial de Gendarmería de esta localidad le informaron que diariamente pasan por la citada plaza unos 500 vehículos con cargas generales, de los cuales 200 transportan desde combustibles, fertilizantes, agroquímicos, gas propano o butano, CO2, ácidos y otro tipo de sustancias peligrosas. De igual modo acontece en la ruta nacional 7.

"Si bien la mayoría de las unidades están debidamente identificadas con los códigos sobre el material de alta peligrosidad que llevan y esto lo saben los bomberos voluntarios cómo actuar en caso de un incendio, la población no está preparada para soportar una instancia de este tipo". Y ejemplificó diciendo: "Supongamos que el accidente se hubiera registrado en una zona urbana, habría que evacuar gran parte del vecindario porque esos productos además de inflamables son tóxicos", indicó.

El funcionario comparó que si el accidente registrado hace un par de años en la ruta 7 cerca de Laboulaye, hubiera sucedido frente a una población determinada, obligaría a evacuar todo un pueblo porque hay nubes tóxicas que impiden respirar a unas 8 o 9 cuadras de distancia del lugar del derrame.

Nunca se dijo cuál era la carga que llevaba ese camión que provocó un corte de dos días en ese camino internacional.

En la región

La problemática es mucho más severa en la A 005 en Río Cuarto, donde se calcula que son 360 camiones cargados con líquidos contaminantes lo que pasan a diario.

Anteriormente Gendarmería Nacional y Córdoba Ambiente establecieron códigos de control, pero en forma lenta se fueron diluyendo y solamente se controlan cargas en las estaciones de peaje cuando son de alta peligrosidad. Hoy, dichos controles casi no existen salvo contadas excepciones.

En ninguna de las poblaciones se han realizado esquemas de prevención tales como simulacros para actuar en caso de un accidente vial de estas características.

"No es fácil prevenir un accidente de este tipo, aun sabiendo que un camión puede romperse, chocar o volcar generando todo un problema. En realidad sería posible el ir trazando un compás de prevención como los que se han realizado hasta el momento y que continuarán en el presente año en los colegios con la prevención sísmica. Allí hay un punto de inicio que progresivamente se puede ir extendiendo al resto de los vecinos, al comprobar la peligrosidad del tránsito de productos peligrosos que a diario circulan en nuestras rutas", explicó finalmente Rodríguez.