¿Por qué son importantes los organismos de control?¿Qué le aportan a la Nación?¿Qué discusiones se deben trazar a futuro? A 30 años de la sanción de la Ley 24.156 sobre Administración Financiera y de los Sistemas de Control del Sector Público Nacional, el presidente de la Auditoría General de la Nación, Jesús Rodríguez, y el síndico General de la Nación, Carlos Montero, participaron de una charla debate coordinada por el secretario General de la Asociación del Personal de los Organismos de Control (APOC) Mesa Nacional, Federico Recagno, y por el secretario General de APOC Seccional Nación, Hugo Quintana. 

En el stand que APOC tiene en el pabellón ocre de la Feria del Libro, los referentes realizaron un repaso a 30 años de la legislación, los cambios que atravesaron las normas y el crecimiento que registraron los diversos organismos de control en pos de una mayor transparencia en el Estado. 

Del Instagram de apoc_mesanacional

"Con los informes de auditoría aportamos transparencia e integridad. A medida que se jerarquiza el control se fortalece el Estado", sostuvo Carlos Montero, titular de la SIGEN.

“Nuestro trabajo de control es para que el gobierno pueda lograr sus objetivos. Con los informes de auditoría aportamos transparencia e integridad. A medida que se jerarquiza el control, se fortalece el Estado”, sostuvo Montero. El síndico señaló que uno de los cuestionamientos que suelen aparecer es “¿adónde van a parar los informes de auditoría?” y que aún hoy se discute si conviene que haya una difusión en medios masivos de comunicación. 

“La relevancia de organismos como la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) quedó en evidencia durante la pandemia con el seguimiento de las campañas de vacunación. Organizamos el control y logramos garantizar que la vacuna llegara hasta el último rincón de cada provincia. Cada vez es más reclamado el trabajo de la SIGEN”, sostuvo.

Por su parte, el presidente de la AGN evaluó como “positivo” el recorrido que la Auditoría ha realizado desde la sanción de la ley hace 30 años. En este sentido, Rodríguez consideró que los trabajos del organismo son hechos en base a “normas estandarizadas” por lo que “no hay margen para la discrecionalidad sobre cómo debe hacerse una auditoría”.

Los trabajos del organismo son hechos en base a “normas estandarizadas” por lo que “no hay margen para la discrecionalidad”, indicó Rodríguez.

Además, indicó que la selección de los órganos a controlar es el resultado de una matriz integral de riesgo que establece el orden de las prioridades, que cada informe es entregado en primer lugar al auditado para que tome conocimiento y pueda hacer su descargo. Además, destacó la importancia de la participación ciudadana en el procedimiento.

“Los avances que se produjeron en estos años tienen que ver con las normas estandarizadas, la transparencia, el acceso a la información pública y evitar un manejo discrecional sobre el cómo y dónde realizar auditorías. Hay prácticas institucionales muy importantes de la Auditoría. Una de ellas es atender y promover la participación ciudadana para que se sugieran temas que atender y al mismo tiempo que haya disposición de parte de la auditoría para acompañar esos intereses”, afirmó.

Rodríguez sostuvo que hay una relación directa entre “la fortaleza de las instituciones y los resultados económicos y sociales” y en este sentido manifestó que “el compromiso de la auditoría es realizar trabajos que favorezcan el control para vigorizar las instituciones”.

“Los organismos de control tenemos una herramienta fundamental para mejorar las instituciones del Estado, para que sean más útiles para la sociedad", indicó por su parte Federico Recagno de APOC. 

Para Recagno este tipo de encuentros, en referencia a la charla, son necesarios ya que permiten pensar sobre mejoras y aspectos técnicos vinculados a los organismos de control, pero también para trazar estrategias a futuro que permitan mejorar las auditorías e instituciones. 

“Los organismos de control tenemos una herramienta fundamental para mejorar las instituciones del Estado, para que sean más útiles para la sociedad. En estos dos últimos años nos vimos obligados a pensar otras formas de funcionamiento de los organismos de control, con auditorías remotas, a distancia, con utilización de la tecnología, estaremos discutiendo pronto el trabajo híbrido. Herramientas que sean más útiles y que también permitan acortar las distancias entre los inicios de nuestros informes y su conclusión. Esto también hará que sean más útiles, van a repercutir mucho mejor en el Estado y en la ciudadanía”, indicó Recagno. 

Por su parte, Hugo Quintana también puntualizó en la incorporación de nuevas tecnologías en función de las auditoría y la relevancia de que una ley como la 24.156 siga vigente ya que es “fundamental” para el desarrollo de la Nación. “Con sus luces y sus sombras, desde los organismos de control siempre se hizo lo que se tenía que hacer”, sostuvo.