La Conferencia Episcopal Española (CEE), la institución administrativa integrada por todos los obispos de las diócesis de España y Andorra, puso en funcionamiento el Plan de Transparencia y Modernización de los sistemas de la gestión de la Iglesia en España para someterse a auditorías que evalúen sus cuentas. 

El Plan cuenta con varios ítems que hacen a la transparencia eclesiástica. En primer lugar, la Iglesia creó un portal de transparencia que agrupa toda la información existente en materia económica.

“La iglesia no se puede quedar atrás. Tenemos que ofrecer mecanismos de plena confianza”, afirmó el vicesecretario para asuntos económicos, Giménez Barriocanal.

Asimismo, el periódico El Economista confirmó que nueve diócesis españolas -distritos o territorios cristianos en que ejercen jurisdicción eclesiástica con sus propias autoridades- se someterán durante este año a diez auditorías externas para revisar sus cuentas con el objetivo de evaluar la situación actual de contabilidad y recibir recomendaciones de mejora.

Un dato llamativo es que Giménez Barriocanal admitió que en cuanto a la reacción de los obispos frente a la fiscalización de sus cuentas, muchos sacerdotes mostraban “perplejidad” en el asunto, mientras que ahora expresan “disponibilidad total”.

En este contexto, el vicesecretario para asuntos económicos puntualizó que “las auditorías no tienen como finalidad evaluar problemas concretos de las diócesis pues cada una es autónoma y funciona de forma independiente”.

Entre las medidas del Plan de Transparencia también están estudiando la posibilidad de implantar una plataforma para hacer donativos que permita, desde una sola página web, poder elegir a qué institución diocesana o parroquial se quiere ayudar, ya sea mediante una aportación puntual o periódica.

Del mismo modo, la Iglesia española diseñará un manual de buenas prácticas sobre inversiones financieras, compras, contratación de servicios y obras. 

La Santa Sede

Desde el Auditor.info, anunciamos tiempo atrás que el banco del Vaticano cuenta con una Ley de Transparencia, Vigilancia e Información Financiera. Se trata de la ley XVIII que la comisión pontifical para el Estado de la Ciudad del Vaticano adoptó en 2013 y se aplica a todos los servicios del gobierno central de la Iglesia.