La iniciativa de la Contraloría peruana permitirá supervisar 500 colegios públicos de Lima para “comprobar si cumplen con la gratuidad de la matrícula escolar, si las instalaciones son idóneas para recibir a los escolares y si están organizados para empezar correctamente las clases”. 

Según el periódico El Comercio, donde se publicó la información, “serán visitados aproximadamente 50 colegios por día”. El vicecontralor general, Édgar Alarcón, aseguró que “serán 54 auditores los que se desplacen por las instituciones educativas de 39 distritos de la capital como parte de la operación Matrículas 2013.”

La campaña, además, se basó en la difusión de las condiciones de inscripción, por lo que el vicecontralor recordó a los padres que “las matrículas escolares son totalmente gratuitas, por lo que la presencia del Órgano Superior de Control en los colegios permitirá detectar riesgos que afecten la transparencia o el incumplimiento de las normas”.

La Institución Educativa Pedro A. Labarthe, en La Victoria, fue la primera en ser visitada. Una de las primeras observaciones que hizo la Contraloría fue que allí se estaba entregando un listado de útiles recomendando la compra de productos escolares de una empresa específica, cuyo logotipo se encontraba impreso. 

Al respecto, el vicecontralor general sostuvo que “se trata de una práctica irregular que orienta a los padres de familia a adquirir una marca determinada.” Y concluyó: “Lo normal es que la lista de útiles se imprima en papel membretado con logo del colegio, señalando el grado de estudios, sin marca de empresa alguna”.