"La ludopatía no es un juego, es una adicción"
La adicción al juego online creció notablemente entre los adolescentes en Argentina, convirtiéndose en una problemática alarmante que afecta su bienestar emocional y social. A pesar de las restricciones legales, el acceso a plataformas de apuestas sigue en aumento.
La adicción al juego online, especialmente entre adolescentes, se convirtió en una preocupación creciente en Argentina, exacerbada por la pandemia y eventos deportivos como el Mundial de Fútbol de Qatar 2022.
En el país, la participación de menores de 18 años en plataformas de apuestas online, casinos y bingos está prohibida por ley. Sin embargo, la adicción al juego, conocida como ludopatía, está aumentando entre los adolescentes, un grupo especialmente vulnerable debido a su etapa de desarrollo emocional y cognitivo.
Por definición, la ludopatía es un trastorno psicológico caracterizado por la compulsión a apostar, y afecta gravemente la vida personal, familiar y académica de quienes la padecen.
Un informe del Observatorio de Adicciones y Consumos Problemáticos de la Defensoría del Pueblo bonaerense indica que el 12,5% de los jóvenes de entre 15 y 24 años apostó de manera online en algún momento de su vida, cifra que aumenta al 15,5% en el grupo de 25 a 34 años. Estos datos reflejan la creciente preocupación por la ludopatía entre los jóvenes, resaltando la necesidad de medidas preventivas y educativas para abordar este problema en la sociedad.
Diversión no es adicción
El juego en línea se vuelve problemático cuando se realiza de forma recurrente y descontrolada, convirtiéndose en lo que se conoce como ludopatía digital. Esta adicción se caracteriza por el impulso incontrolable de apostar, a pesar de las pérdidas económicas y las consecuencias negativas para el trabajo, la familia y las relaciones sociales. Afecta a todas las clases sociales, con mayor incidencia en la adolescencia, especialmente entre los varones.
Es importante distinguir entre el juego recreativo, que funciona como una actividad de esparcimiento, y el juego problemático, que anula la voluntad de la persona, haciendo necesaria la intervención de un profesional de la salud.
Walter Martello, defensor adjunto de la provincia de Buenos Aires, resumió esta situación en una comunicación con El Auditor.info al señalar que “las apuestas dejan de ser un juego cuando se convierten en una pulsión que afecta algún aspecto del desarrollo de la vida de las personas y esa pulsión no puede ser interrumpida. La ludopatía no es un juego, es una adicción”.
Ludopatía infantil
En Argentina, 7 de cada 10 niños, niñas y adolescentes (NNyA) viven en la pobreza, según el último informe de Unicef. Este dato incluye a menores de 18 años cuyos hogares no pueden costear una canasta básica de bienes y servicios, o que no tienen acceso a derechos básicos como la educación, la protección social, una vivienda adecuada, agua potable o un entorno seguro. En este contexto, la ilusión de ganar grandes sumas de dinero con el juego en línea puede resultar atractiva para quienes buscan una salida rápida a sus problemas financieros o una forma de alcanzar estatus y reconocimiento social.
La ludopatía es un trastorno psicológico caracterizado por la compulsión a apostar.
Los juegos en línea son accesibles y prometen ganancias rápidas, lo que los convierte en una opción tentadora para satisfacer la necesidad de emoción. Sin embargo, muchos jóvenes no logran escapar de esta trampa. La ludopatía infantil puede tener un impacto profundo en la salud mental de los adolescentes, generando problemas emocionales y psicológicos como cambios de humor, ansiedad, tristeza e insomnio. Además, esta adicción puede ser una puerta de entrada a la depresión, agravando aún más la vulnerabilidad de estos jóvenes.
El contexto económico y social actual hace que el dinero fácil resulte tentador, especialmente para quienes enfrentan dificultades financieras. El psicólogo Federico Marchiano, en conversación con El Auditor.info, señaló que “jugar compulsivamente, ya sea en apuestas deportivas o en un casino no regulado, ofrece la ilusión del dinero fácil”. Sin embargo, esta búsqueda de ganancias rápidas puede tener consecuencias graves.
Por otro lado, Martello advirtió que el crecimiento de la industria del juego no está acompañado por una regulación adecuada. Además, destacó un cambio alarmante en la edad de inicio de esta cuestión, “antes se centraba en adultos mayores, pero ahora se desplazó al grupo de 13 a 24 años, que enfrenta las dificultades más graves relacionadas con las apuestas”.
Legalidad del juego
En 2023, se estima que las visitas a plataformas de apuestas ilegales aumentaron un 150%, concentrando el 80% del capital que circula en el juego. Estos sitios operan sin autorización del Estado, evaden impuestos y carecen de regulación, lo que genera un impacto negativo significativo en la sociedad. En la actualidad, únicamente las plataformas de apuestas con el dominio "bet.ar" son legales, y está prohibido que personas menores de 18 años las utilicen; estas deben exhibir el logo +18 como advertencia.
En este contexto, el defensor adjunto de la provincia advierte que el mensaje “apostar en sitios legales” puede resultar engañoso, ya que, aunque parece fomentar la legalidad, en realidad sigue incentivando el juego.
Señales a tener en cuenta
La adicción al juego se caracteriza por un deseo intenso y difícil de controlar, lo que lleva a una pérdida de control sobre la vida del individuo. Las personas afectadas experimentan cambios significativos en su comportamiento y estado de ánimo, como ansiedad, irritabilidad, cambios repentinos de humor e aislamiento social.
Los especialistas coincidieron en que la ludopatía también está influenciada por las presiones sociales que fomentan un consumo desmedido, promoviendo la idea del "todo ya", sin esfuerzo ni frustración. La omnipresencia de la tecnología, junto con la cultura del consumismo y la búsqueda de gratificación instantánea, contribuye a la adopción de comportamientos adictivos.
Es importante considerar las consecuencias de esta situación, que incluyen problemas financieros, dificultades en el rendimiento escolar, trastornos de salud mental y deterioro en las relaciones con pares y familiares. Federico Marchiano resaltó que “muchas veces los padres son los últimos en enterarse de que su hijo o hija está atravesando esta problemática”.
Además, el psicólogo enfatizó la necesidad de “una campaña muy fuerte advirtiendo sobre los riesgos” asociados a esta adicción.
Por otro lado, Walter Martello indicó que “el acceso de jóvenes, incluso niños de 12 o 13 años, a las billeteras virtuales representa un salto significativo hacia la incorporación de estos menores en las apuestas”. En este contexto, subrayó la importancia de colaborar con las empresas y la cámara que las agrupa para desarrollar mecanismos que restrinjan cada vez más esta posibilidad de acceso.
“Publicidad agresiva”
La creciente influencia de la publicidad en torno al juego generó preocupaciones, especialmente sobre su impacto en los menores. El psicólogo indicó que “la publicidad está por todos lados, desde influencers hasta en programas deportivos. La liga de fútbol de AFA está auspiciada por una casa de apuestas, y los equipos más grandes del país, como Boca y River, tienen a sus sponsors en el mismo ámbito. Es un bombardeo constante”. Esta exposición permanente hace que los menores sean particularmente vulnerables, ya que “son muy propensos a caer bajo la tentación de apostar, creando un contexto propicio para que los jóvenes se vean atrapados”, completó.
Por su parte, Martello destacó la necesidad de regular la publicidad relacionada con el juego, incluyendo la de influencers y la esponsorización en eventos deportivos y artísticos. Subrayó que es crucial establecer “señales de alerta” para prevenir que se asocie la apuesta con el éxito económico, tal como se implementó en otros países con resultados positivos.
Además, el defensor adjunto advirtió que los influencers deben ser conscientes de su papel en esta problemática. “Si consideran la publicidad como una fuente de ingresos, deben tener en cuenta que difundir acciones ilícitas está regulado por la legislación vigente. No basta con enviar una carta documento; es crucial advertirles sobre su participación en este delito. Solo regulando sus mensajes hacia plataformas legales e ilegales podremos tener alguna posibilidad de éxito en la lucha contra esta epidemia”.
Federico Marchiano coincidió en que “penalizar a ciertas fuentes de difusión es necesario, pero no suficiente”. En este sentido, subrayó la importancia de realizar un esfuerzo social más profundo para alertar sobre los riesgos asociados a la apuesta compulsiva.
Estrategias para combatir la ludopatía infantil
El gobierno de la provincia de Buenos Aires implementó una serie de medidas para combatir la ludopatía infantil mediante la creación de una Mesa de Trabajo Interministerial. Esta mesa, compuesta por las carteras de Gobierno, Salud, Seguridad, Justicia y Derechos Humanos, Comunicación Pública, la Dirección General de Cultura y Educación, y el Instituto Provincial de Lotería y Casinos, tiene como objetivo fundamental establecer un Observatorio de Ludopatía Adolescente. En colaboración con universidades nacionales y provinciales, fundaciones y ONGs, se llevarán a cabo campañas de concientización sobre los peligros asociados con la ludopatía y los juegos de azar ilegales.
Las acciones incluirán foros, charlas participativas y talleres dirigidos a jóvenes, así como la distribución de materiales de sensibilización en el marco del programa "Saberes que cuidan" de la Dirección General de Cultura y Educación. Además, se planteará la utilización de datos biométricos para el acceso a plataformas de juego online legales y el bloqueo de direcciones IP de sitios de apuestas, tanto legales como ilegales, en las 4.400 escuelas secundarias de la provincia.
Por su parte, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires intensificó sus esfuerzos al intimar a influencers y figuras públicas que promocionan plataformas de apuestas online a través de redes sociales. Mediante la Lotería de Buenos Aires (LOTBA), se enviaron cartas documento a actores y periodistas que incitan a sus seguidores a realizar apuestas, especialmente en eventos deportivos. Estos mensajes advierten sobre posibles acciones legales por considerarlos partícipes en la promoción de actividades prohibidas, conforme al artículo 301 bis del Código Penal de la Nación.
Además, el gobierno porteño identificó y bloqueó 772 URL de sitios de apuestas, tanto legales como ilegales, en las redes de WIFI de las escuelas y en el BA WIFI. También suspendió la inscripción para nuevas licencias de operadores de apuestas, limitando la actividad a solo 11 operadores registrados y con licencia activa en CABA.
Con estas estrategias coordinadas, tanto el gobierno provincial como el de la ciudad buscan crear un entorno más seguro y saludable para los jóvenes, protegiéndolos de los riesgos asociados a la ludopatía.
Proyectos en el Congreso
En la Cámara de Diputados, hay actualmente siete proyectos de ley destinados a regular el juego online. Al menos 83 diputados, que representan un 30% de la Cámara baja, firmaron iniciativas relacionadas con el control de las apuestas. El debate se inició en cuatro comisiones, incluida la Comisión de Familias, Niñez y Juventudes, que contó con la presencia de la Defensora Nacional de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Marisa Graham, y referentes de organizaciones civiles.
Los proyectos en discusión abogan por una regulación estricta de la publicidad de las casas de apuestas, la implementación de sistemas de verificación de identidad más rigurosos y multas para los infractores. Uno de los más respaldados es el presentado por Eduardo Toniolli, diputado de Unión por la Patria. Toniolli destaca que “el crecimiento exponencial de los juegos de apuesta online es el resultado de una bancarización más temprana a través de billeteras virtuales y la aparición de plataformas con filtros etarios fácilmente superables”. Su propuesta busca regular la publicidad de manera similar a las restricciones impuestas al tabaco, limitando la publicidad no dirigida de juegos de azar y apuestas, permitiendo solo la segmentada hacia mayores de edad.
Otras iniciativas incluyen una propuesta del PRO que se enfoca en mejorar los procesos de verificación de edad, y una de Micaela Moran, también de Unión por la Patria, que busca implementar una campaña preventiva para niños, niñas y adolescentes. Además, la diputada Marcela Antola, de UCR, presentó un proyecto que regula la publicidad de apuestas online y establece un registro de apostadores en línea y un sistema de autoexclusión.
A estas iniciativas se suman las propuestas de Constanza Alonso (Unión por la Patria), Marcela Campagnoli (Coalición Cívica), Ricardo López Murphy (Hacemos Coalición Federal), y los diputados Itai Hagman y Natalia Zaracho.
Desayuno de trabajo
Fundación Éforo impulsó una nueva mesa de conversación y de trabajo junto a especialistas, funcionarios, legisladores, organizaciones de la sociedad civil y jóvenes para debatir y reflexionar sobre el fenómeno de las apuestas online entre adolescentes, su impacto en la salud física y emocional y los efectos que esta problemática produce.
Estuvieron presentes en el evento:
- Micaela Moran, diputada nacional por la prov. de Bs. As.;
- Walter Martello, defensor adjunto de la prov. de Bs. As.;
- María Fernanda Azcoitia, presidenta del Centro de Asistencia al Suicida;
- María Fabiana Carrizo, docente y rectora del Instituto “Adoratrices”
- María Vitón, coordinadora del equipo de orientación Instituto “Adoratrices”;
- Fiorella Filotti y Tiziana Ferrerazzo, participantes de Escuela de Vecinos;
- Federico Marchiano, psicólogo;
- Milagros Barredo, estudiante de Derecho;
- Santiago Stura, equipo de educación de Faro Digital;
- Valentino Díaz Fontau, integrante de Estudiantes Organizados;
- Federico Recagno, presidente Fundación Éforo;
- Fabián Méndez, coordinador general Fundación Éforo;
- Hernán Caram, encargado de informes socioeconómicos de Éforo.