El documento fue presentado en junio de este año.

Médicos y vecinos del Hospital Tornú denunciaron ante la Defensoría del Pueblo de la Ciudad la situación que atraviesa el centro de salud del barrio porteño de Villa Ortúzar.

Entre los reclamos más sobresalientes se encuentran la terminación de la sala de neumotisiología, la provisión de un tomógrafo y de un endoscopio digestivo, y la efectivización de nombramientos de personal. Además, se denuncia la falta de insumos básicos, como gasas, y la inexistencia de un conmutador que permita la comunicación de los pacientes con el hospital y de los servicios entre sí.

Este hospital tiene un servicio de endoscopia con médicos nombrados, pero hace dos años se robaron unos equipos y se rompieron otros, y desde entonces, (el área) no funciona, explica Humberto Sanzio, de la comunidad del Tornú.

Según los médicos del área de gastroenterología, el 80% de los pacientes necesitan endoscopía y, como el centro no tiene el servicio, se derivan por región al Hospital Durand. Esto implica una tardanza los diagnósticos y, si algún cuadro es severo, se puede generar la pérdida de chance terapéutica, figura legal con la se podría acusar a los médicos de privar a un paciente de la probabilidad de que sobreviva, se cure o curse su enfermedad con un determinado confort.

En el caso del tomógrafo hay teóricamente una licitación de $ 1.800.000 para un equipo asignado al Tornú, aprobada en el año 2008 por la Legislatura, refrendada en el 2009 y que todavía esta dando vueltas, explica Blanca Gaudio, vecina y miembro de la comunidad.

El 6 de abril de este año se le realizó en la Legislatura Porteña una interpelación al Ministro de Salud de La Ciudad Jorge Lemus. En esa oportunidad, los médicos y vecinos de Tornú reclamaron el tomógrafo, y el Ministro les aseguró que el hospital contaría con el equipo a finales de ese mes, pero nunca llegó.

Según los miembros de La Comunidad del Tornú, la dirección del hospital argumenta que no hay un espacio adecuado para el funcionamiento del tomógrafo, pero que ese tema está pronto a resolverse.

No obstante, la Defensoría del Pueblo porteña obtuvo una respuesta desde la Dirección de Recursos Físicos del Ministerio de Salud porteño, refiriéndose al área de tomografía computada. En ese descargo, el director del área Moisés Luis Aruj, dijo que no se ha previsto en el presupuesto plurianual del trienio 2010/2012 la realización de las tareas mencionadas.

Otro problema del Tornú es la falta de una sala de neumotisiología. Este hospital es de referencia en tuberculosis y sistemáticamente tenemos pacientes tuberculosos que hay que aislar, al no tener una sala de neumotisiología, los aislamos en otras salas y nos disminuye la disponibilidad de camas. Además, es riesgoso tener a tuberculosos en zonas que no corresponden, ya que contagian, aseguró un médico que pidió preservar su identidad porque, dijo, sufrió persecuciones por las denuncias realizadas.

En un informe de la Auditoría General de la Ciudad de Buenos Aires (AGCBA) sobre la situación del Hospital Tornú, aprobado este año con datos de 2008, se hacía referencia a la situación de la sala de neumotisiología: Hay dos baños para 12 personas, los techos están en mal estado, las estufas a gas tienen un funcionamiento deficiente y hay estufas eléctricas donadas por el personal.

Según Blanca Gaudio, la sala se habría reequipado aunque permanece cerrada y, pese a la insistencia de los vecinos, el Gobierno porteño y la dirección del hospital no dan respuestas. En un momento, la explicación fue que no hay un office de enfermería especial para el área, porque vendrían a ser dos turnos con los mismos enfermeros y no tienen un lugar aparte; ahí se inició el conflicto, quedó parada la obra y no sabemos hasta cuando, asegura Blanca.

El informe de los auditores porteños señala algunas otras deficiencias que, si bien no fueron presentadas ante la Defensoría del Pueblo, preocupan a los miembros de la comunidad. Las principales son el cierre de la residencia de cirugía torácica y la falta de quirófanos.