Pese a haber encontrado falencias que van desde inversiones sin estrategias ni control hasta el “riesgo potencial” de dejar “decisiones libradas a la subjetividad” de algún funcionario, la Auditoría General de la Nación (AGN) consideró que la ANSES “cumple razonablemente con los criterios establecidos” en el manejo del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS). 

El organismo de control aprobó este año un informe sobre la gestión que el ente previsional hizo entre junio de 2014 y diciembre de 2016 de esa masa de recursos percibida por el Estado tras la anulación del sistema de jubilaciones privadas.  

Según ese trabajo, en la ANSES se advierte la “ausencia de una política de inversiones que defina una estrategia clara de administración e inversión de los activos” del Fondo. 

El informe dedica un apartado al uso del FGS en lo que pudo haber sido el Hollywood argentino. 

Es más, los técnicos afirmaron que “los planes anuales no contemplan un análisis financiero (que plasme) las necesidades de liquidez del fondo para cada período, ni la capacidad que tendría el mismo ante una eventual intervención para afrontar obligaciones del sistema previsional”.

Para la AGN, esta falta de una hoja de ruta “genera una situación de riesgo potencial, ya que las decisiones de inversión quedan libradas a la competencia y subjetividad del funcionario responsable”, y completa: “No hemos tenido conocimiento de que exista un texto ordenado, claro y suficiente de los criterios específicos de inversión a utilizarse”.

Asimismo, los investigadores compararon sus hallazgos con informes anteriores y comprobaron que “persiste la ausencia de pautas para operar en el mercado secundario como ser: rentabilidad mínima esperada, criterios de liquidez, rango de precios o títulos a negociar”.

Encriptados

Por otra parte, el ente de control remarcó que “falta una normativa específica para establecer la condiciones de autenticidad de la información” que circula en torno al Fondo de Garantía de Sustentabilidad. 

En ese sentido, el informe añade que, “al no estar encriptados los datos informados por los bancos custodios (del FGS), los mismos pueden ser modificados sin que quede registro de lo realizado. Además, la ausencia de automatización en los procesos de valuación, actualización y análisis de la cartera, (sumado a los) procesos de intervención manual, puede generar errores”.

La Isla Demarchi

Como dato color, la Auditoría examinó el uso del Fondo a la luz de lo ocurrido con los distintos proyectos que se quisieron llevar a cabo en la Isla Demarchi. 

Un poco de historia. En 2012, el entonces Gobierno nacional decretó la desafectación de los terrenos de la Isla para tareas portuarias y proyectó allí la instalación de un Polo Audiovisual que tendría la torre más alta de Latinoamérica y se convertiría en una especie de Hollywood argentino

Así era la torre que se había proyectado para el polo audiovisual.
Así era la torre que se había proyectado para el polo audiovisual.

Más allá de que emprendimiento nunca pudo llevarse adelante (entre otras cosas, porque requería la autorización del entonces Gobierno porteño), en el interín se había decidido la creación de una empresa, Nuevos Aires del Sur, para intentar avanzar con la iniciativa.

El paquete accionario de esa compañía correspondía en un 90% al Fondo de Garantía de Sustentabilidad y el 10% restante a la entonces Secretaría de Comunicación Pública. 

Pues esa participación de la ANSES en Nuevos Aires del Sur fue estudiada por la AGN y, entre las conclusiones, se destaca que al 31 de diciembre de 2016 la firma “no había sido dada de alta en ningún tributo; no se encontraba formalizada la designación de nuevas autoridades del directorio de la Sociedad, ni de la Comisión fiscalizadora; no se habían contratado auditores externos; y no existía aprobación de sus estados contables ni su presentación ante la Inspección General de Justicia”.

Intereses

Otro dato color. En un apartado de su investigación, el organismo de control afirmó: “El Secretario de Finanzas, integrante del Comité Ejecutivo (del FGS), se desempeñó como Presidente de la Sociedad Gerente del Fondo AXIS hasta septiembre de 2015, y no se ha obtenido evidencia acerca de una comunicación en la cual se aclare dicha circunstancia, lo que se interpretaría como un conflicto de intereses incumpliendo el art.13 y 15 de la Ley 25.188 ‘Ética en el ejercicio de la Función Pública’ y los ‘Principios de Seguridad y Rentabilidad de las Inversiones con Activos del FGS’”.

Para la próxima entrega se analizará las conclusiones de la AGN sobre el uso del Fondo en relación las acciones de la empresa Petrobrás Argentina.