Para ANSES, dos de sus áreas tienen niveles de error de hasta el 35%; según AGN, es casi el doble
Son la Coordinación de Trámites Complejos, que da beneficios a estibadores y ex empleados públicos, y la Unidad de Convenios Internacionales, encargada de mediar con otros países. La Administración acepta un 5% de margen de error. Hay fallas en el cómputo de los años de aporte y el cálculo de retroactivos, descuentos indebidos y demoras en los trámites.
El plan operativo anual de la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSES) dice que las áreas del organismo no pueden superar el 5% de error en su labor.
Pero la propia ANSES reconoció que dos de sus oficinas registraron porcentajes de falencias superiores a ese límite. Se trata, por un lado, de la Coordinación de Trámites Complejos, que otorga beneficios previsionales en casos que presentan dificultades por el tipo de actividad (estibadores portuarios, régimen especial de docentes e investigadores científicos, magistrados y personal del Poder Judicial, ex empleados de la Administración Pública Nacional, entre otros); y, por el otro, la Unidad de Convenios Internacionales, una especie de mediadora en los trámites de trabajadores extranjeros en el país y de argentinos en el exterior.
En rigor, la Gerencia de Control de la ANSES sostiene que durante el segundo semestre de 2007 y el primero de 2008, la Coordinación de Trámites Complejos mostró un nivel de error del 23,9%; mientras que para la Unidad de Convenios Internacionales ese porcentaje de fallas se elevó al 35%.
No obstante, hay otras cifras que difieren de las que reconoce la Administración. Estos datos figuran como descargo de la ANSES en un informe de la Auditoría General de la Nación (AGN), que afirma que esos márgenes de error alcanzan el 40% para Trámites Complejos, y el 53% en Convenios Internacionales.
Ya sea que se tomen unos porcentajes u otros, el organismo de control concluye que las performances “superan ampliamente” el límite que la propia ANSES se impuso en su plan operativo.
Errores
En el área de Trámites Complejos, la Auditoría detectó fallas en los cálculos de haber de alta y de retroactivo, que se realizan en forma manual, “lo cual origina mayor posibilidad de error, observándose varios casos (de expedientes) en que se omitió considerar diversos períodos del retroactivo”. Por ejemplo, los técnicos descubrieron que no se liquidó la coparticipación de una pensión “teniendo en cuenta que había una menor a la que le correspondía dicha prestación”.
Asimismo, “no se encontraron constancias que evidencien la fecha inicial de pago tomada por el organismo (la ANSES) para hacer los cálculos”, dijo la AGN, que aprobó su informe este año, y añadió que también se observaron “diferencias en el cómputo de los años de aportes”.
Además, en los archivos de Trámites Complejos se encontró que “no todos los expedientes están foliados, en algunos falta la firma de los responsables (del área), y el procedimiento de registro de primeros pagos genera confusión”, concluyeron los auditores.
En su descargo, la ANSES afirmó: “Ante los controles mencionados, se ha procedido a implementar procedimientos que subsanaron los errores detectados oportunamente”.
Por el lado de Convenios Internacionales, se observaron distintos criterios para calcular la prorrata, que es la proporción del haber que le corresponde pagar a la ANSES por la aplicación de la Ley de Jubilaciones y Pensiones vigente en el país. Puntualmente, la AGN encontró “expedientes similares cuya prorrata fue calculada de distinta forma”.
De la documentación examinada por los técnicos “no surge la fecha inicial de pago, dato importante para el cálculo del haber retroactivo”. Tampoco se incluyen, en el cálculo del primer beneficio, el aumento de la movilidad del último mes. Ante la consulta de la AGN, personal de la ANSES manifestó que “no llegan a liquidar el aumento por no recibir las pautas de liquidación a tiempo”. No obstante, “no se han visualizado ajustes practicados con posterioridad a fin de regularizar la situación expuesta”, aclaró el organismo de control.
También se detectaron “deficiencias” en el manejo de información. Puntualmente, hay “ausencia de integridad de los datos en las bases, y errores de carga en lo aplicativos”. Por ejemplo, en el Registro Único del Beneficiario (RUB), la fecha de baja se llega a registrar hasta 15 meses después de la muerte del jubilado o pensionado.
Y entre sus hallazgos, la Auditoría destaca que en los documentos analizados hubo expedientes en los que, en lugar de liquidar haberes impagos, “se procedió al descuento de ellos”.
Control interno
Desde septiembre de 2006, la ANSES aplica un sistema de supervisión operativa, llamados Grupos de Control y Capacitación, que tienen el objetivo de hacer mediciones periódicas para mejorar la labor de las distintas oficinas del organismo. La AGN agregó que desde que ese mecanismo está en funcionamiento, la Unidad de Convenios Internacionales “sólo fue controlada en una oportunidad”.