Catamarca.- Más allá del respeto de la institucionalidad y del mandato popular que permitieron a Mónica Hernández retomar la conducción del municipio, nadie niega que la intendenta esté verdaderamente complicada en su situación judicial.

Al remitir al Senado el estado de avance de las causas en las que investiga a Hernández, el fiscal de Santa María, Marcelo González, advirtió sobre "un grave desorden administrativo y económico" que surge de las auditorias del Tribunal de Cuentas y "de la multiplicidad de delitos en contra de la administración pública, entre los cuales hay hechos de fraude a la administración con fondos de rentas generales y de regalías mineras; y malversación de fondos de regalías por montos millonarios". Según la información del fiscal, las causas que pesan sobre Hernández son las siguientes:

-Por usurpación de autoridad, al haberse resistido a acatar la suspensión que le aplicó el CD. Esa causa ya fue elevada a juicio.

-Fraude en perjuicio a la administración pública por la irregular contratación de un camión regador "por un valor exorbitantemente mayor al real". En 2008 abonó en concepto de alquiler 19.800 pesos ,más combustible por mes. La causa fue elevada a juicio pero la defensa presentó una oposición que está en trámite de resolución.

-Están en etapa final de instrucción otras causas en las que está imputada por fraude y malversación de caudales públicos por haber omitido el control del TC, del CD y las leyes que limitan la contratación directa. Al parecer contrató sin licitación alguna a empresas para la elaboración de distintos proyectos. Por ejemplo, por la elaboración de un proyecto de desagues cloacales domiciliarios pagó 350 mil pesos. 

-Está imputada del delito de malversación de caudales públicos por 27 hechos en concurso real por haber trasnferido dinero de la cuenta de regalías a la cuenta corriente del municipio y por su utilización indebida en gastos corrientes. Gastó poco más de 2 millones de pesos de las regalías en gastos corrientes y no reintegró el dinero.