Un reciente informe de la Auditoría General de la Nación alerta sobre la complejidad de la situación de la deuda provincial.

El estudio, de 122 páginas, analiza el perfil de vencimiento de los pasivos provinciales antes de que ocurriera la implosión financiera de octubre, por lo que se puede suponer sin dificultad que el horizonte financiero de las provincias es hoy aún más complejo.

Para medir el impacto y la vulnerabilidad de todas las jurisdicciones, la AGN elaboró un cuadro con el grado de afectación de la coparticipación al pago de los vencimientos de las deudas provinciales. Allí se informa que las provincias más afectadas serán Buenos Aires (37,5% de la coparticipación comprometida), Río Negro (37,1%), Neuquén (28,6%) y Córdoba (26,7%).

En tanto, las provincias más aliviadas son La Pampa y San Luis, con el uno por ciento.

Indica el trabajo que "dada la distribución de las obligaciones, se observa una alta concentración en el escenario de corto plazo (años 2007 y 2008) con una presión próxima al 50% de los recursos coparticipados para las jurisdicciones de Buenos Aires y Río Negro y de un nivel que fluctúa entre el 30% y el 40% para otras seis jurisdicciones: Jujuy, Neuquén, Misiones, Córdoba, Formosa y Corrientes.

En el escenario de mediano plazo (hasta el año 2011 inclusive), la presión sigue siendo particularmente alta para las jurisdicciones de Buenos Aires y Río Negro -con cocientes no inferiores al 35%- y algo menor -aunque nunca inferior al 20%- para otras 9 jurisdicciones: Jujuy, Neuquén, Misiones, Córdoba, Chaco, Entre Ríos, Formosa, Mendoza y Corrientes".