Publicado: 20-03-09

A partir de abril se realizarán en toda la provincia. Se verificará la cantidad de asistentes, horarios de funcionamiento, condiciones de higiene y calidad nutricional de los alimentos.

A partir de mañana, la Sindicatura General de la provincia comenzará a realizar controles permanentes y exhaustivos en comedores comunitarios y de copa de leche de la ciudad de Santa Fe.

"La idea es controlar el servicio de 151 copas de leche, que se distribuyen en este momento y que tienen la participación de fondos públicos, y 317 comedores comunitarios. El control no sólo tiene que ver con la cantidad de personas que asisten, sino también con los días y horarios de  funcionamiento, los recursos humanos afectados, la calidad nutricional de los alimentos que se expenden, el equipamiento, las condiciones de higiene y detalles administrativos de la institución", explicó en conferencia de prensa el ministro de Desarrollo Social, Pablo Farías, acompañado por su par en la cartera de Gobierno y Reforma del Estado, Antonio Bonfatti.

Toda la provincia

"Estos controles regulares van a ser realizados por auditores especializados, que forman parte de la Sindicatura General de la Provincia, que es el órgano de control del gobierno provincial. El objetivo principal es mejorar el servicio nutricional que se presta a través de distintas entidades en la ciudad y, luego, en toda la provincia", detalló Farías.

Es así que estos operativos permanentes comenzarán mañana en la ciudad de Santa Fe y, a partir de abril, también se desarrollarán en Rosario. Farías agregó que "con la colaboración de municipios y comunas, se extenderán a toda la provincia durante este semestre".

Antecedentes

El año pasado se realizó una prueba piloto de operativos de control sobre comedores comunitarios de la ciudad, que terminó con 44 establecimientos a los que se les retiró el subsidio estatal por no reunir requisitos mínimos, como la asistencia de comensales.

"Encontramos diversas irregularidades en más de 40 instituciones. Algunas se subsanaron, en el marco de un proceso de reacomodamiento. Hoy podemos decir que los comedores están funcionando en mejores condiciones que el año pasado. Pero a partir de denuncias anónimas y constataciones que seguimos efectuando, se necesita avanzar en este operativo de control", afirmó el ministro.

En tal ocasión, se les exigió a todos los comedores a presentar una declaración jurada donde debía constatar la cantidad de asistentes, horarios y lugar de funcionamiento. El 30 % (40 comedores) no suscribió la declaración porque no pudo indicar la prestación que realizaba. Inmediatamente, se les dejó de entregar la mercadería.

Finalmente, Farías aclaró que, a pesar de que a algunos comedores se les retiró el subsidio provincial, "pueden seguir funcionando porque cuentan con subsidios nacionales o el apoyo de instituciones".