San Juan.- La Cámara de Diputados decidió ayer por mayoría intimar al Tribunal de Cuentas a que en el término de 10 días presente su cuenta general del año 2008.

Se debe a que por una fuerte interna entre sus miembros, el organismo no ha cumplido todavía con su obligación de revisar la legalidad de los gatos que realizó ese año. Es la segunda vez que los legisladores resuelven en el mismo sentido: la primera fue en abril, pero el Tribunal la rechazó. 

La intimación salió con el voto de todos los bloques, a excepción del basualdista, que se fue del recinto. Y en caso de no cumplir, los diputados le advierten a los miembros del Tribunal de Cuentas que podrían ser multados.

La historia viene del año 2009, cuando los integrantes del organismo no se pusieron de acuerdo en el análisis de la cuenta del ejercicio anterior. Todo derivó en una situación insólita: cumplieron con la obligación de revisar los números del resto de las reparticiones públicas, pero nunca aprobaron o desaprobaron los propios. 

Tras un pedido de informes, la Cámara de Diputados intimó hace 8 meses al organismo a rendir cuentas y como respuesta obtuvo un recurso objetando esa resolución por no tener facultades. 

Ayer, el diputado justicialista Javier Ruiz negó que exista un trasfondo político y aseguró que sí tienen facultades para revisar la cuenta del Tribunal.