El titular de la Auditoría General de la Nación (AGN), Leandro Despouy, reconoció ayer que "a partir del 2003 empezamos a tener más dificultades para acceder a la información y eso fue cada vez mayor", denunciando de esa manera el cerco que el Gobierno le impone al acceso a la información oficial. 

Estas declaraciones tuvieron lugar durante una conferencia de prensa a agenda abierta, en otra jornada del ciclo "Poder Responde", organizado por la Fundación Konrad Adenauer Argentina. 

Despouy, presidente de la AGN, un organismo externo encargado de controlar al Poder Ejecutivo y asistir al Congreso, sostuvo que "la mayor presencia del Estado implica mayores procesos de controlador y esto último no se fortaleció; por el contrario". 

Al referirse a la situación del INDEC, Despouy dijo que "hay serios riesgos de que no ref leje con exactitud lo que pasa". Pero fue la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) la que se llevó una de las críticas más firmes de auditor. Despouy recordó que el año pasado debió recurrir al Congreso y a la Justicia para obligar a la SIGEN a entregar información y que, aún así, continuaron las maniobras dilatorias y evasivas. "A pesar de los pedidos que le hicieron los otros poderes, la SIGEN retiró de la página web todos los informes, incluso los previos". Y agregó: "Los ocultó. Los tenía, pero no quería darlos". 

Requerido sobre el enfrentamiento entre el Gobierno y la Corte Suprema de Justicia, no dudó en calificar a ese conf licto como "un hecho deplorable y grave desde la perspectiva institucional". Además, consideró, que "la comunidad internacional va a registrar esto y lo va a censurar".