El organismo objetó que el Instituto de la Vivienda haya elevado los presupuestos antes de contratar en forma directa las empresas que harán los proyectos.

Tras fracasar sendos llamados a licitación pública y cotejo de precios, el Instituto Provincial de Vivienda y?Desarrollo Urbano recurrió a contratar en forma directa obras por casi $ 118 millones para construir 850 viviendas. Sin embargo, el paquete de cinco proyectos habitacionales (en Famaillá, en Rumi Punco, en la capital, en Bella Vista y en El Chañar) fue objetado por el Tribunal de Cuentas. El organismo de control cuestionó que la repartición provincial haya elevado los presupuestos originales (con los que se inició cada licitación) antes de adjudicar directamente los trabajos y advirtió que se podría haber violado el principio de igualdad.

 "Es una formalidad que será debidamente corregida", aseveró el titular del Instituto de la Vivienda, Gustavo Durán.