Publicado: 24-06-2012 
  
Tucumán.- Han puesto un freno a la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) en su intento de anular facturas que consideraba "truchas". El fisco quería tildar de apócrifos los comprobantes emitidos por un contribuyente, sin tener en cuenta que la operación existió y que la compañía que los recibió mostró pruebas fehacientes de que así fue.

En la actualidad, la AFIP cuenta con un instrumento que es valioso para detectar comprobantes falsos, pero que, al mismo tiempo, despierta cierto rechazo por parte de los contribuyentes. Ocurre que la denominada "base APOC" del organismo a cargo de Ricardo Echegaray -si bien es una importante herramienta para "escrachar" a las firmas que fueron creadas con el único objeto de generar una usina de crédito fiscal ficticio- muchas veces incluye a personas que lejos están de tener como meta estafar al fisco. Esto genera un doble inconveniente. Quienes fueron incluidos no pueden acceder a ningún tipo de beneficio fiscal. Mientras que aquellos que realicen operaciones con ellos están imposibilitados de computar los créditos que se generen por las compras y, por lo tanto, deberán pagar más impuestos.