Insisten con la falta de seguridad en los vagones, pero Metrovías lo niega
Publicado: 02-03-2012
La polémica por el subte puso en tela de juicio el estado de la infraestructura del servicio.
Mientras en el Gobierno porteño insistieron con que el transporte es "inseguro", la concesionaria Metrovías rechazó las acusaciones de la Ciudad.
En la conferencia del miércoles, Mauricio Macri ya había criticado la calidad y la seguridad en el servicio. Ayer tomó la posta su jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, quien aseguró: "Si (al subte) lo manejamos igual, terminamos como el Sarmiento. Hay vagones de la línea A que tienen 100 años.
El subte tiene graves problemas en su funcionamiento y además es inseguro".
La concesionaria Metrovías abandonó su habitual bajo perfil y mediante un comunicado respondió: "Metrovías niega enfáticamente las afirmaciones realizadas por diversas autoridades del Gobierno de la Ciudad. La empresa garantiza un adecuado nivel de confiabilidad y seguridad del servicio. En esta gestión se ha enfatizado el mantenimiento preventivo y predictivo, lo que reduce la cantidad de fallas (incluso del material rodante de la línea A, que es el de mayor antigüedad). Producto de esto es que se incrementó en un 160% la disponibilidad de flota para el servicio y se redujo la cantidad de averías cada 100.000 km, pasando de 43 en 1993 a 7,7 averías en 2011".
Sin embargo, se conoció un informe crítico a la gestión de la concesionaria. El Ente Regulador de los servicios públicos de la Ciudad informó que en los controles que realizaron al servicio el año pasado detectaron 11.320 fallas, de las cuales al momento del segundo control no se habían resuelto 9.141, más del 80%.
Por las dudas sobre la situación de la infraestructura, el Gobierno porteño había informado el martes que antes de terminar de aceptar el traspaso del servicio iba a contratar a una auditoría internacional para evaluar los vagones, las vías, las señales, los circuitos eléctricos y los procesos de gestión de seguridad.
Esta medida quedó anulada con el posterior rechazo a la transferencia del servicio.
Por lo pronto, la Nación se había comprometido a adquirir 150 vagones al gobierno de China. Según SBASE, la Nación le comunicó que sólo compraría 45.