Ciudad Auditada tuvo lugar la semana pasada en la Casa de la Cultura de Quilmes con el objetivo de promover el debate sobre la importancia del control como herramienta de la gestión pública. Se trata de una iniciativa de Éforo, la fundación de la Asociación del Personal de los Organismos de Control (APOC).

La apertura estuvo a cargo de Myriam Pucheta, Auditora General del municipio de Quilmes; Guillermo Sánchez Sterli, Jefe de Gabinete, y Fernando Perez, Secretario de Gobierno de esa localidad, quien aseguró que “uno de los objetivos principales es transparentar la administración pública”.

El encuentro contó con tres paneles. El primero, llamado Experiencias: casos innovadores de vinculación entre el control y lo público, lo encabezó Pucheta, quien contó sobre la creación de la Auditoría Interna como órgano de control y de gestión del municipio.

“El fin es alcanzar los niveles más altos de transparencia para que los vecinos tengan la tranquilidad de que hay una gestión que verdaderamente se preocupa y se ocupa que sus recursos sean destinados a aquellos servicios que administran”, sostuvo Pucheta.

A continuación expuso Paulo Wanderson Moreira Martins, miembro del Tribunal de Cuentas de Brasil. Su ponencia tuvo que ver con las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC’s) aplicadas a la participación ciudadana y el control público en su país. Algunas de estas ideas, fueron señaladas por El Auditor en una nota en la que seleccionamos apps móviles en el mundo para impulsar el gobierno abierto y la transparencia. 

Por su parte, el Secretario general de la seccional bonaerense de APOC, Pedro Fernández, habló sobre control externo en la Provincia de Buenos Aires y aseveró que “todavía cuesta entender que tenemos que ser más preventivos que sancionatorios, creo que la vuelta de tuerca que le falta al control público en todos los órdenes es el control por resultado”.

El segundo panel, Horizontes: gobierno abierto, gestión municipal y control ciudadano, estuvo a cargo de Oscar Oszlak, doctor en ciencia política y master en administración pública, quien centró su charla en la importancia de las TIC’s para “establecer la posibilidad de una doble vía entre estado y ciudadanía”. 

Oszlak expuso que “el Estado debe abrir la caja negra” y aseguró que esto “no supone solamente publicar información para que la ciudadanía pueda acceder a ella, sino que implica muchas más cosas, como instar a los funcionarios públicos a que escuchen a la ciudadanía y responder a las críticas y observaciones”.

El cierre de la jornada estuvo a cargo de Federico Recagno, Secretario de Fundación Éforo y Secretario adjunto de APOC, quien integró el tercer y último panel, Visiones: Política, control y sindicalismo.

“La democracia no es un bien a alcanzar, es un bien que hay que seguir alcanzando. Y para eso hay que ir reformulando las instituciones que van acompañando al sistema democrático”, declaró. 

Asimismo, citó a las ciudades que tienen organismos de control municipal como Córdoba capital, Cosquín, San Francisco, Río Cuarto, Villa Carlos Paz, Salta capital, La Rioja capital, Santa Fe capital, Santiago del Estero capital, San Luis capital, Viedma, Rosario, La Banda, Bariloche, Comodoro Rivadavia, Trelew, Río Grande, Villa Mercedes y la Ciudad de Buenos Aires. 

En este contexto y a modo de cierre, sostuvo que lo que se propone en Ciudad Auditada es “la creación de organismos de control municipal que tengan participación ciudadana a través de la elaboración de propuestas para el plan de acción, de la capacitación de la ciudadanía y de ONGs”. Y finalizó: “La idea de Ciudad Auditada es que sea una ciudad auditada por nosotros”.