Mayor integridad y transparencia para luchar contra la corrupción
En el marco de un seminario organizado por la Universidad Nacional de Cuyo, expertos en políticas públicas analizaron distintas estrategias que podrían devolver la confianza en las instituciones. "Las leyes están pero no se cumplen", coincidieron.
¿Es posible combatir la corrupción? ¿Cómo el acceso a la información puede colaborar con la integridad y la transparencia? Con la intención de deslizar respuestas a esos interrogantes se realizó un seminario abierto organizado por la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Cuyo.
La propuesta, cuya finalidad fue reflexionar sobre el derecho ciudadano de conocer cómo se administra el Estado y promover la participación para que haya un mayor control, contó con la participación de la investigadora especialista en medios y comunicación, Adriana Amado; el abogado con orientación en derecho internacional público, Germán Emanuele; y el sociólogo Facundo Heras, director ejecutivo de la Fundación Nuestra Mendoza.
“La corrupción es un problema de carácter internacional”, señaló Emanuele, quien es director de Transparencia y Lucha contra la Corrupción en Poder Ciudadano. “Ante una crisis sanitaria como la que atravesamos, las discrecionalidades aumentaron. Apenas comenzó la pandemia aparecieron sospechas de corrupción en la compra de insumos”, agregó.
Junto a Poder Ciudadano, Emanuele viene trabajando la promoción de políticas públicas de integridad. De esta manera denominan a aquellos procedimientos que estén orientados en prevenir, detectar y corregir irregularidades que puedan derivar en hechos de corrupción.
La rendición de cuentas y el mayor acceso a la información son fundamentales en una gestión transparente.
“Hay cuatro pilares que consideramos clave en lo que son las políticas de integridad: el ejercicio ético de la función pública; la transparencia y máxima divulgación de los actos de la administración pública; la participación y el control de la gestión; y la rendición de cuentas”, indicó Emanuele.
Además se refirió a la implementación de principios más éticos en el desempeño público, un esquema de incentivos y desincentivos, y un gobierno más abierto. En este último punto consideró central “la rendición de cuentas para las pautas de comportamiento de funcionarios y mayor acceso a la información”.
Promover la participación ciudadana
Uno de los pilares en la lucha contra la corrupción es la participación ciudadana. En este sentido, los expositores destacaron los programas que se registraron en algunas provincias, aunque consideraron que aún resultan insuficientes.
"Hay una mayor distancia de la ciudadanía con sus representantes”, señaló Germán Emanuele de Poder Ciudadano.
“Si bien hay algunos procesos, también ocurre que hay una mayor distancia de la ciudadanía con sus representantes”, señaló Emanuele. Por su parte Adriana Amado, que también es referente de InfoCiudadana y Poder Ciudadano, coincidió y sostuvo: “Hay una caída fuerte de la confianza en las instituciones políticas. El desgaste en Latinoamérica la convirtió en la región con mayor desconfianza”.
Uno de los datos destacados por Amado fue que cuanta mayor información dispone el público, mayor confianza construye. “Cuanta más desinformación hay, la apatía es más grande. Por eso es importante generar una mayor participación para una mayor transparencia”, indicó Amado.
En este sentido, sostuvo que también es importante el pedido de informes y manejo de datos. “Hay que pensar en información clara y con datos accesibles que permitan hacer comparaciones, analizarlos, realizar cruces. Algo que no suele ocurrir hasta ahora”, señaló.
Normas que no se aplican
“Las leyes están, pero no se cumplen”, resaltó a su turno Facundo Heras. “Mendoza se caracteriza por la institucionalidad que tiene, la normativa es buena pero tienen que estar acompañadas con los recursos necesarios para que se apliquen y sean efectivas”.
En este sentido, el sociólogo indicó que pensar políticas de integridad y de formación pública es una manera de comenzar a romper con la queja generalizada y construir una vía más propositiva.
“Hay mucha normativa sobre acceso a la información. Pero con eso no alcanza. Tenemos que buscar la manera de democratizar esa información, que se presente de forma accesible. Hay muchos organismos que todavía no responden a los pedidos de informes”, afirmó el director de Nuestra Mendoza.