¿Cómo es el proyecto Distrito Joven?
El Gobierno porteño planea crear un área de nocturnidad en Costanera Norte, pero incluyó algunas obras que no estaban planificadas inicialmente. En las audiencias públicas, la mayoría de las críticas giraron en torno al cumplimiento de las normativas vigentes y al impacto ambiental.
Masterplan “Distrito Joven” es el proyecto de obras civiles y viales en Costanera Norte impulsado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. El objetivo es que haya más lugares de esparcimiento, deportes, actividades culturales y gastronómicas. En total, son 73 hectáreas, de las cuales 14 estarán destinadas a concesiones por el plazo de 10 años para el funcionamiento de los locales nocturnos.
La propuesta nació en mayo de 2018, cuando se promulgó la Ley 5.961 sobre Distrito Joven. Esa norma contemplaba cinco sectores en los que se incluían paseos costeros, parques públicos, áreas destinadas a la instalación de locales gastronómicos y bailables, y sectores para uso cultural y de esparcimiento.
Durante febrero se realizaron audiencias públicas. Desde la Defensoría del Pueblo aseguraron que hubo fuerte rechazo al proyecto.
Pero luego aparecieron dos leyes más: la 6.289, que permite la venta del terreno y llama a concurso público, para las áreas que comprenden Costa Salguero y Punta Carrasco, y la 6.475 que deja habilitada la construcción de viviendas, hoteles, comercios y oficinas en el sector.
Todo este conjunto de normas en torno al Distrito Joven fue analizado en distintas jornadas de la audiencia pública convocada en febrero de 2022 por el Gobierno porteño. “La inmensa mayoría de los participantes se manifestaron en contra del proyecto”, aseguró en diálogo con este medio, la responsable del área de Derechos Urbanos, Espacio Público y Ambiente de la Defensoría del Pueblo de la CABA, Bárbara Rossen.
Rossen repasó lo acontecido durante la audiencia – participó en representación de la Defensoría del Pueblo y del Colectivo de Arquitectas en Defensa de las Tierras Públicas junto con 55 colegas - y explicó que las críticas fueron variadas, pero mostraron claros puntos en común. “No se cumplen principios básicos de la Ley General de Ambiente y el proyecto presenta como espacios parquizados a enormes franjas de terreno que de ninguna manera son espacios verdes”, agregó.
Las zonas de Costa Salguero y Punta Carrasco no forman parte del plan. En esas áreas se planifica un desarrollo inmobiliario que se encuentra frenado por la Justicia.
Otro cuestionamiento es que el "masterplan" omite la zona de Costa Salguero y Punta Carrasco, en los cuales se piensa el desarrollo un proyecto inmobiliario, que actualmente está judicializado por la presión de los vecinos de la Ciudad.
“Quizás el Gobierno no muestra el proyecto completo para no poner en evidencia desde ahora que su verdadero propósito no es desarrollar una zona de intensa actividad cultural y de esparcimiento junto al río, sino llevar adelante otro enorme desarrollo inmobiliario con hoteles, oficinas y actividades comerciales de uso restringido”, analizó.
Además, la referente de la Defensoría afirmó que el estudio de impacto ambiental que hizo el Gobierno porteño en la zona fue para cumplir. “Solo tiene en cuenta la información brindada por el mismo Gobierno y no considera otras fuentes. Minimiza la proximidad del aeropuerto, que ya por definición implica severos riesgos ambientales y admite que el agua de la zona se encuentra contaminada”, detalló la arquitecta.
Por último, Rossen explicó que, si bien las audiencias públicas no son vinculantes, "a todos nos preocupa que no se escuche lo expresado en ellas e igual se avancen con las obras".