Se reunió el Frente Sindical de Acción Climática en la sede de la Federación de Trabajadores Cerveceros y Afines (FATCA) con el objetivo de empezar a plantear propuestas que colaboren con la disminución de la emisión de gases de efecto invernadero. 

Una de las primeras iniciativas partió de la voz de Carlos Frigerio, secretario general de la Federación. “La basura hay que hacerla desaparecer de cualquier modo. No se trata de residuos, sino de recursos, y entenderlo así es un primer paso".

En ese sentido, agregó que para lograr ese cambio conceptual, lo que se necesita es educación: “Hay que insistir por una ley que incluya una materia de medio ambiente dentro de la currícula en todos los niveles escolares”, afirmó el titular de FATCA.

Por su parte, el secretario general de la Asociación del Personal de los Organismos de Control, Federico Recagno, propuso trabajar en conjunto entre los distintos gremios. “Sería bueno que el Frente le proponga a la Auditoría General de la Nación (AGN) alguna auditoría sobre los temas que tenemos en agenda para el Plan de Acción 2020, que da lugar a la participación de las organizaciones de la sociedad civil y también a sindicatos”. 

En esa línea, mencionó que el organismo de control tiene la obligación, por ejemplo, de fiscalizar la Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR), cuestión que involucra a varias localidades. "Se puede trabajar en conjunto con los gremios municipales que forman parte del Frente de Acción por el Cambio Climático".

Por último, Recagno plantó la necesidad de “buscar una figura jurídica para avanzar en la representación de la mesa del Frente”.   

Durante la jornada también se debatió sobre distintos temas del reto global y los compromisos asumidos por Argentina en el Acuerdo de París en 2015, que entran en vigencia en enero de 2020. 

Esa reflexión estuvo a cargo de Rodrigo Rodríguez Tornquist, especialista en políticas de sostenibilidad y cambio climático, quien se desempeña como asesor en la Asociación Latinoamericana de Ferrocarriles.

“La agenda no es únicamente ambiental. Es económica, comercial, financiera, geopolítica, laboral y social. Porque todas las acciones para mitigar la amenaza medioambiental e ir transformando los recursos en renovables tienen un costo incremental y eso alguien lo tiene que financiar”, explicó.

En ese sentido, Tornquist recordó que en la capital francesa “Argentina presentó la contribución menos ambiciosa de toda la región”. Es que el país se comprometió a reducir la emisión de gases un 15% de manera incondicional y un 17% de forma condicional si accede a financiamiento para la descarbonización. “Cuando asumió el gobierno de Macri, en cambio, el primer ítem aumentó 18% y el segundo a 19%", sostuvo.  

A su vez planteó que "el crecimiento de la actividad económica y los puestos de trabajo conllevan el aumento de emisiones de gases de efecto invernadero", en relación a incompatibilidad existente entre las necesidades del país en materia laboral y los compromisos asumidos para 2020 en el entorno natural. 

En el plenario también se le dio la bienvenida a los nuevos gremios que adhieren al Frente.