La Auditoría General de La Nación (AGN) junto a la Universidad de Morón (UM) llevaron a cabo el evento “Estado del Sistema de Control. Reflexiones sobre los 30 años de la creación de la Auditoría General de la Nación y la sanción de la Ley de Administración Financiera". Entre sus oradores estuvieron presentes el presidente de la AGN, Jesús Rodríguez; el decano de la Escuela Superior de Leyes, Walter Oscar Fernández, y el director General de la Carrera de Abogacía y del Observatorio de Políticas Públicas, Marcelo Combis.

“Con la Ley se establece un dispositivo de control que combina el control interno en cabeza de la SIGEN y el control externo de la AGN”, señaló Rodríguez. 

Luego de un breve agradecimiento por parte del decano de la UM, el titular de AGN recordó los 30 años de la Ley Nº24.156, sancionada en 1992. Hasta ese momento, el control en los actos de Gobierno estaba fundado en el criterio del Tribunal de Cuentas: un contador del tribunal fiscal analizaba la decisión del decreto, veía si cumplía la legalidad y, si no lo hacía, hacía una observación, pero el poder administrador podría generar un decreto de inasistencia. “Con la Ley se establece un dispositivo de control que combina el control interno en cabeza de la SIGEN y el control externo de la AGN”, afirmó Rodríguez. 

“El cambio conceptual incorporando a la Auditoría General de la Nación se basó en las mejores prácticas internacionales. La norma tuvo un salto cualitativo con la Constitución Nacional de 1994, que consagró a la Auditoría con rango de estatus constitucional y le encomendó cosas muy previsoras. Además de dotar al Congreso con la AGN como asistente técnico, también le dio el mandato para ser una acción ineludible de auditoría para la aprobación de la cuenta de inversión. Otra innovación relevante fue establecer que el titular del organismo sea del partido político que tenga mayor aprobación opositora en las bancas”, destacó el titular de Auditoría. 

Los trabajos de la AGN se llevan adelante cumpliendo normas internacionales estandarizadas que cumplen todas las entidades fiscalizadoras superiores del mundo y evita todo tipo de discrecionalidad acerca del modo para llevar adelante la auditoría. “A través de un estudio de grandes volúmenes de datos, podemos identificar a todos los organismos estatales a través del trabajo de 12 variables y ver cuáles son los organismos que mayor riesgo de auditoría tienen”, señaló Jesús Rodríguez.  

Los trabajos de la AGN se llevan adelante cumpliendo normas internacionales estandarizadas para evitar todo tipo de discrecionalidad en la auditoría.

Además, el auditor remarcó el rol del país en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). En 2015 Naciones Unidas elaboró una acción global y simultánea. Estableció 17 objetivos para que el mundo atienda las metas de progreso social de promoción de DDJJ y cuidado de medio ambiente de acción ciudadana. 

Asimismo, Rodríguez destacó los programas de participación ciudadana. “El ejercicio de control de la asistencia al Congreso lo hemos enriquecido con esa participación de las organizaciones de sociedad civil en la formulación de pedidos de temas para ser incorporados al plan de acción y al mismo tiempo en la interacción con expertos o actores de la sociedad civil que permitan mejorar el trabajo en la auditoría”, destacó.  

Efectos de la pandemia

Sobre cómo afectó la pandemia en el país y en los organismos de control, el titular de la AGN sostuvo que "las consecuencias son de muchas dimensiones, entre ellas, lo sanitario, lo vital y lo económico y social. América Latina fue el epicentro, con menos del 10% de la población mundial tuvo algo más del 30% de los casos registrados. En materia económica y social, la caída de la economía, empresas cerradas y puestos de trabajo perdidos”.

En tanto, remarcó que en la necesidad de los estados para atender esta emergencia se recurrieron a atajos normativos y las consecuencias que eso llevó. “Hay estudios recientes que señalan que más allá de las compras derivadas de necesidades sanitarias, y sólo enfocándonos en esa asistencia estatal ciudadanos y sector privado por la caída de la actividad financiera, desde enero de 2020 a diciembre de 2021 se estima que los gastos realizados son equivalentes a 30 veces el PBI de Argentina”, añadió Rodríguez. 

"El ejercicio de control de la asistencia al Congreso lo hemos enriquecido con la participación de las organizaciones de sociedad civil".

“En materia institucional hay un centro de estudios realizados por las Universidades de Gotemburgo en Suecia y Notre Dame en Estados Unidos que llevan a cabo la calidad democrática en más de 150 países de manera sistemática. Con la pandemia construyeron un indicador que revela cómo las decisiones tomadas por los gobiernos constituían un peligro para la calidad democrática de los países. Argentina se ubicó penúltima, solo después de Sri Lanka. Quedamos mal parados”, reafirmó Jesús Rodríguez.  

Por último, en representación del Consejo Académico de la Universidad de Morón, la secretaria académica Marcela Gerald hizo entrega de una placa a Jesús Rodríguez en representación de los 30 años de la creación de la Auditoría General de la Nación.