Argentina fue el cuarto país del mundo en ratificar el Convenio 190 de la Organización Internacional del Trabajo. La norma regula la violencia y el acoso en los espacios laborales, un problema que afecta a 6 de cada 10 trabajadores en el país. Los empleados de la Administración Pública Nacional acaban de adecuar su convenio colectivo y las modificaciones ya están en vigencia. 

Funcionarios, trabajadores y representantes gremiales acordaron redefinir la violencia laboral, lo que implicó incorporar la violencia por razón de género, la protección a las mujeres trabajadoras y trabajadoras LGTBI+. También se estableció la necesidad de realizar un seguimiento de las denuncias presentadas, las sanciones y/o resoluciones adoptadas en cada caso; profundizar un enfoque preventivo con más capacitaciones y que las actuaciones sean tramitadas con carácter muy urgente, entre otros puntos como la obligación de disponer de lactarios en los edificios de los organismos y la licencia para la integración familiar, guarda con fines de adopción y adopción de integración. Y avanzar en la adecuación a marcos normativos como Ley Micaela y Ley del Cupo Laboral para personas Travestis, Transexuales y Transgénero.

“Era una adecuación muy esperada”, consideró Carla Pitiot, dirigente gremial de APOC, vicepresidenta de BICE y vicepresidenta de Éforo. “Argentina está siguiendo muy de cerca las instancias del Convenio 190 de OIT. Es un convenio en el que han trabajado mucho las mujeres sindicalistas, para sumarle perspectiva de género al problema de la violencia laboral”, agregó en declaraciones al ciclo Todas las Cosas que se emite por Radio Sí.

Pitiot destacó además que en el país se impulsó rápidamente la ratificación del convenio de la OIT, ya que es un tema en el que “no hay grieta sino unanimidad por parte de los legisladores”. En su rol como dirigente sindical de la Asociación de Personal de los Organismos de Control (APOC) sostuvo que “como trabajadores del estado, para nosotros es un paso enorme” contar con un convenio colectivo “aggiornado” y “más inclusivo”. 

“Hay una referencia a nivel regional e internacional que mira a Argentina por la alta capacitación sindical que tenemos. Lo que sucede en el país no hay que naturalizarlo. Está entre los de mayor cantidad de trabajadores sindicalizados, tenemos una experiencia recorrida de convenios colectivos, participación y negociación colectiva, en la pelea por conquistar derechos de los trabajadores y buscar la igualdad de condiciones. Argentina a nivel internacional siempre tuvo constancia en poder lograr un convenio que protegiera a los trabajadores”, afirmó. 

Capacitaciones en género

En el marco de la Iniciativa Spotlight, durante diciembre de 2020 y junio de 2021 se realizaron capacitaciones dirigidas a delegadas y delegados sindicales de las provincias de Buenos Aires, Salta, Jujuy y Córdoba. Las experiencias fueron sistematizadas en un informe para producir conocimiento práctico para otros actores de espacios sindicales y promover la reflexión.

El proyecto fue impulsado por Fundación Éforo, que preside Federico Recagno, la Fundación UOCRA, y el Instituto para la Igualdad de Oportunidades (IPLIDO) de la UTHGRA. “Fue una experiencia de capacitación maravillosa, muy enriquecedora y novedosa”, explicó Pitiot y resaltó que el trabajo quedó registrado en un informe que se transformó en una herramienta sobre el abordaje de la violencia laboral.  

En este sentido indicó que se está pensando en llevarlo a cabo en otros lugares y seguir profundizando el acercamiento en las provincias donde se trabajó. “Siempre hay que procurar ambientes laborales sanos, además de salarios decentes”, afirmó Pitiot.