El hecho salió a la luz en la rendición de cuentas de la gestión 2011 del Hospital Antonio Scaravelli. Según el Tribunal de Cuentas mendocino, los expedientes de los pagos para la compra de insumos de limpieza, librería, biomédicos y descartables, a través de la modalidad de compra directa, "no contaban con los remitos firmados que acrediten fehacientemente la recepción de los productos".

La falta de certezas sobre el ingreso de los elementos de limpieza, por ejemplo, llevaron al organismo de control a consultar a la responsable de la recepción de los mismos y oportunamente "manifestó no haber recibido insumos" de Balcor S.A, Maita S.A, Zuin, M.Eva, Logística Beltrán y MADAF S.A. Todos ellos proveedores de insumos para el Hospital, según los expedientes.

De este modo, el Tribunal infiere que "estos elementos nunca ingresaron al hospital", pese a que las autoridades firmaron la respectiva documentación y las facturas fueron abonadas. 

En la mayoría de los expedientes en los cuales se encontraron falencias, el informe deja entrever que "la existencia de remito fue constatada, pero no había firma de la autoridad competente y en otros casos faltaba el sello aclaratorio", por lo cual, "no se puede identificar al responsable de la recepción".

Con relación a los insumos biomédicos y descartables, "los remitos de recepción se encontraban sin firmar y en otros casos con firma sin aclaración". Una situación similar se verificó con las compras de artículos de librería.

Frente a esta situación, el Tribunal de Cuentas de Mendoza decidió aplicar cargos por bienes abonados y no ingresados a cuatro funcionarios, en forma conjunta y solidaria, por un total de $ 480.438,23. Se trata del Gerente Administrativo Gerardo Nahín, de los Directores Ejecutivos Guillermo Ferro  y Gustavo Perone, y del Gerente Asistencial, Pablo Nicolás Frassinelli.

Pero la cosa no termina ahí

Además, los mismos funcionarios fueron multados por irregularidades parecidas, esta vez relacionadas con la contratación de servicios de transporte. Se trata de pagos que también fueron abonados y de los cuales tampoco hubo ninguna constancia que determine que se haya llevado a cabo la prestación.

Es que según el Tribunal mendocino, durante la gestión 2011, hubo expedientes de pago o liquidación para el proveedor Di Prima Roberto, correspondientes al traslado de pacientes, de documentación, materiales y bultos, en los que faltaba la documentación que confirme que efectivamente se realizó el servicio; es decir no estaban "las planillas debidamente avaladas por el prestador del servicio, las autoridades del hospital y por los beneficiarios del servicio".

La multa, en este caso, ascendió a $ 7.000, divido entre los funcionarios mencionados anteriormente y de la siguiente manera: Gustavo Perone, $ 1.000,00; Pablo Nicolás Frassinelli, $ 1.000,00; Guillermo Ferro,$ 2.000,00 y Gerardo Nahín, $ 5.000,00.