La Auditoría General de la Nación (AGN) elaboró un estudio especial para agrupar las observaciones que aparecieron en sus informes efectuados entre 2004 y 2007 sobre el funcionamiento de proyectos financiados por entes internacionales de crédito. De esa tarea de sistematización, surgió que las irregularidades en la contratación de servicios de consultoría son “moneda corriente” en ese tipo de emprendimientos y que, al mismo tiempo, en los últimos años disminuyeron las falencias vinculadas con el seguimiento de las obras que se realizaron.

En el informe, la AGN analizó 196 auditorías elaboradas por su Departamento de Control del Endeudamiento con Organismos Financieros Internacionales sobre 78 proyectos solventados por los bancos Interamericano de Desarrollo (BID), Mundial (BM) e Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF). El valor total de esos emprendimientos asciende a U$S 19.879,8 millones. Los montos auditados, en tanto, representan el 36,2% de este total, U$S 7.199,6 millones.

El organismo de control clasificó sus observaciones en ocho categorías: gastos en bienes, equipos y servicios; consultorías; capacitación; obras; procedimientos administrativo-contables; manejo de fondos; ejecución del programa en cuestión; y otros. En este envío, El Auditor.info resumió los ítems gastos en consultorías y obras.

Gastos en servicios de consultoría

Entre las auditorías analizadas, la mayor parte de las observaciones relacionadas con gastos en consultoría tienen que ver, por un lado, con el proceso de contratación de esos servicios, por ejemplo “incumplimiento de pautas establecidas por las instituciones financiadoras, o normas nacionales en la materia”, y, por el otro, con irregularidades en el pago a consultores, como demoras, desembolsos por cifras diferentes a las convenidas y falta de comprobantes.

Para la AGN, las falencias en los procesos de contratación de consultorías plasmadas en sus informes son “generalizadas”. “Solo en 2005 –dice el estudio- este tipo de observaciones se presentó en el 49% de los proyectos auditados, la marca más baja del período (2004-2007)”. A partir de entonces, las irregularidades aparecieron en el 56% de las investigaciones de 2006 y en el 70% de las de 2007.

Con respecto cómo se pagaron los servicios de consultoría, el estudio especial señala una reiteración de hallazgos como liberación de pagos antes de que los consultores presenten –o se les aprueben- sus informes, o “fechas de pago anteriores a la presentación de facturas”. “En todos los ejercicios se encontraron aspectos observables en esta materia en más del 40% de los proyectos auditados, con un pico en el ejercicio 2007, cuando aparecieron en el 56% de los casos”, afirmó la AGN.

No obstante, el organismo destacó otro tema que se repitió en sus investigaciones: “Las observaciones vinculadas con la inexistencia de ternas (de consultores), o contratos suscriptos e inicio de tareas en fechas anteriores a la aprobación de los actos administrativos (resoluciones) que los ampararon, son moneda corriente en los proyectos con financiamiento externo”.

Las obras

Por otra parte, las observaciones que figuran en los trabajos de la AGN vinculados a los gastos en obras, tienen que ver con procedimientos de contratación de empresas, incumplimientos en los convenios (como atrasos o cambios injustificados en las ejecuciones), y deficiencias en el seguimiento y la certificación de los emprendimientos.

“El dato más significativo en este capítulo es que en todos los ejercicios existen observaciones relacionadas con procesos de contratación de obra en más del 20% de los proyectos auditados”, dice el informe. Más allá de que la AGN reconoce que esa performance es menor a la registrada en otros capítulos, como el que abordó los servicios de consultoría, resalta su importancia por los montos que están en juego en la ejecución de un emprendimiento.

Los incumplimientos de los contratos de obra figuran en el 18,9% de los informes de 2004 y en el 15,2% de los de 2005.

No obstante, como “dato alentador”, la AGN remarcó que desde 2006 bajó la cantidad de observaciones relacionadas al seguimiento de obras y certificaciones. En aquel año, esas falencias aparecieron en casi el 20% de las auditorías, mientras que en 2007 figuran en el 7,3% de las investigaciones.