La Dirección de Recursos Tributarios Energéticos, la dependencia provincial que debe recaudar, fiscalizar, determinar y controlar tanto el canon como las regalías de los recursos energéticos locales, tiene un “grado de profesionalización medio”. Del total de empleados, “nueve son profesionales” y “ocho no (incluyendo en esta categoría personas con secundario incompleto)”. Así lo sostuvo la Auditoría General de Salta, provincia que ocupa el segundo lugar en el país por el volumen de producción de sus yacimientos gasíferos y el séptimo en materia petrolera.

El informe, aprobado el año pasado sobre datos de 2010, explica que “el 35% del personal era contratado” y que, de esos, “el 80% no era profesional”. Para el organismo de control, “contratar personal -por locación de servicios o de obra-, debería responder a una necesidad puntual del ente de llevar adelante una determinada tarea con personal especializado, siendo para esto la profesión de la persona, una condición importante a ser considerada al momento de la selección”.

El informe señala que la dependencia presentaba “un uso generalizado de las formas flexibles de empleo público (contrataciones temporarias, por locación de servicios, etc.) que podría ir en detrimento de la objetividad y la continuidad de las políticas públicas, incrementando la discrecionalidad en las decisiones vinculadas a recursos humanos”. Ante tal estado de situación, los auditores recomendaron “limitar la contratación de personal a la necesidad exclusiva y especializada del desarrollo de alguna función que, temporal y eventualmente, requiera el organismo, independientemente a los cambios en la gestión de Gobierno”.

Además, al momento de la auditoría, se observó que “todos –los trabajadores- tenían una antigüedad menor a los 3 años”.

Respuesta de la Dirección

La Dirección respondió a la observación de la auditoría sobre la falta de profesionalización del organismo y, paradójicamente, la ratificó: “Son estudiantes universitarios avanzados y responden a la necesidad de contar con la cantidad de personal idóneo para el normal y eficiente desempeño -de las funciones- de esta Dirección, teniendo en cuenta que están orientadas a un segmento técnico específico como es el Hidrocarburífero. Contar con personal especializado es altamente costoso y la Provincia no puede equiparar los sueldos ofrecidos en el Sector Privado”.

Recomendaciones de la Auditoría: más profesionales y más incentivos

La Auditoría provincial recomendó “dotar a los empleados y funcionarios de herramientas para su perfeccionamiento y -así- acrecentar el grado de profesionalidad de la estructura”, todo ello “con el objetivo de contribuir a la posibilidad de brindar un servicio público más eficiente”. El ente de contralor recuerda que “lo importante es que la planificación de Recursos Humanos”, no debe limitarse por “la restricción presupuestaria”, sino, “por una real orientación estratégica”.

Por otra parte, el informe sostiene que “no había un sistema de incentivos”, lo que “disminuye las posibilidades de generar mayores índices de motivación, comportamientos proactivos y emprendedores en la búsqueda de metas y resultados exitosos”.

En función de lo expuesto, los auditores recomiendan: “Rediseñar un sistema de jerarquización del personal, basado no solo en la antigüedad sino también en el desempeño y mérito de los agentes, que traiga aparejado un ascenso real en la estructura acompañado de mayores responsabilidades y funciones”. Es decir, promover el ascenso en función del rendimiento y la capacidad y “no de las proximidades políticas o personales”.