La Sigen asegura que Caballero desvió los fondos para el autopago
Según el documento, al cual tuvo acceso El Territorio, esta casa de altos estudios no tenía financiamiento para concretar ésta operatoria, hoy considerada nula por la Sigen.
Es que para el autopago se utilizó dinero que tenía por fin regularizar el desfinanciamiento producido por la incorrecta liquidación de los haberes del personal de la universidad. Esto es lo que se desprende de la auditoría realizada por la Sigen y solicitada por las autoridades de la UNaM, que ahora terminaron cuestionando el contenido de dicho escrito.
La Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) autorizó el 30 de noviembre del 2007 el envío de un millón doscientos mil pesos a la UNaM para "mitigar el desequilibrio presupuestario producido por la incorrecta liquidación del concepto Zona Desfavorable". Así afirma el informe N° 125/08 GSIS de la Sigen, emitido con fecha de noviembre de 2008, tal como adelantara ayer este matutino. Agrega el escrito que "dichos fondos no incluían la financiación de la deuda salarial emergente por la Ordenanza N° 048/05-HCS". Con claridad, la Sigen advierte que no estaba destinado al autopago, tal como ocurrió. En el citado documento, sostienen que desde la universidad, aún no rindieron cuentas, como se exige. De esta manera, dicha dependencia no tiene información oficial sobre el destino real que finalmente le dieron a los fondos enviados.
El 2 de enero de este año el rector, antes que regularizar la situación presupuestaria, para lo cual se le envió el dinero, instruyó a la Secretaría General de Economía y Finanzas de la UNaM para que disponga la liquidación retroactiva, al mes de mayo de 2006, del incremento salarial de los funcionarios que otorga la Ordenanza N° 048/05 del Consejo Superior.
La UNaM debía rendir cuentas a la SPU del destino final del dinero. Esto aún no sucedió, según también consta en el informe de auditoría de la Sigen.
Además, el autopago dejó en rojo las arcas de la universidad misionera, ya que al librar los cheques para abonar a los funcionarios, la cuenta corriente creada para los sueldos de la UNaM no tenía los fondos suficientes para afrontar el pago. "La cuenta corriente (sueldos) abierta en el Banco Patagonia S.A. N° 710384632, contra la que se libraron los cheques correspondientes al pago retroactivo efectuado en enero de 2008, no contaba con los fondos suficientes para hacer frente al mismo", señala el escrito del organismo nacional. A su vez, detalla que al finalizar enero de 2008, la cuenta sueldos de la UNaM presentaba un saldo negativo de 239.423,49 pesos.