La nueva legislación irlandesa tendrá por objeto proporcionar un marco legal sólido en el que los trabajadores puedan plantear todo tipo de inquietudes a los empleadores y reguladores sobre posibles irregularidades encontradas en su lugar de trabajo. La propuesta, entre otras cuestiones, ayuda a crear un entorno más seguro donde los empleados tendrán derecho a obtener reparación por despido improcedente, así como por discriminación u acoso. 

"El proyecto de ley debe darle la seguridad a todos los trabajadores de que en caso de que alguna vez tuvieran que tomar la decisión de hablar sobre las malas conductas en el lugar de trabajo, encontrarán que la sociedad valora sus acciones como totalmente legítimas, apropiadas y de interés público”, sostiene Brendan Howlin, ministro de Gasto Público y Reforma de Irlanda.

El informe publicado por Transparencia Internacional, sostiene que la ley promueve un sistema de “divulgación escalonada” que anima a los trabajadores a informar a su empleador. Sin embargo, en caso de que los empleados considerasen que la información podría ser encubierta, tendrán derecho a presentarse directamente ante las autoridades y los medios de comunicación. 

El director ejecutivo de Transparencia Internacional de Irlanda, John Devitt, dijo que "esto podría ser un paso muy importante en la lucha contra la corrupción y promoción de la buena gobernanza”. Y agregó: “Esta legislación va a ser buena para los trabajadores, los empleadores y el público”.

Principales propuestas

Las disposiciones del proyecto de ley incluye una indemnización de hasta cinco años por despido injustificado. Además, se afirma que si un denunciante o miembro de su familia sufriera coacción, hostigamiento, intimidación o discriminación por parte de un tercero, la legislación prevé un derecho de acción por responsabilidad extracontractual contra esa persona.

Asimismo, la iniciativa presta especial atención a la protección de la identidad de un denunciante; los mismos se beneficiarán de la inmunidad civil de las acciones por daños y perjuicios y un privilegio cualificado bajo las leyes de difamación.