El Índice de Responsabilidad Pública (IRP), diseñado por la Asociación del Personal de los Organismos de Control –APOC-, se presentó en la ciudad de San Juan, en el marco del Quinto Congreso Argentino de Administración Pública durante el mes de mayo.  

En un ámbito propicio para establecer el intercambio de teorías y estudios, que comprendan las diversas problemáticas que hacen a la gestión pública, los autores del índice expusieron el proceso de construcción y realizaron reflexiones acerca de la experiencia recogida en su implementación.

El Congreso fue organizado por la Asociación de Administradores Gubernamentales – AAG - y la Asociación Argentina de Estudios de Administración Pública – AAEAP-, como también, por la Secretaría de Gabinete y Gestión Pública, dependiente de la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación, y el Gobierno de la Provincia de San Juan.

El proyecto IRP pretende calificar, medir y valorizar la responsabilidad pública desde una óptica no convencional, postulándola como “el imperativo moral de adoptar comportamientos institucionales que tengan reprecusiones positivas sobre la sociedad”.

Es por eso, que al considerar que el mandato principal de la responsabilidad pública es promover las relaciones de confianza, sus autores expresaron: “La gran contribución de un gobierno en este aspecto es precisamente hacer las cosas que sirven para ganarse la confianza de la sociedad”.

¿Cómo cuáles? “Crear “valor social” hacia afuera (para los ciudadanos) y hacia adentro (para los servidores públicos), fortalecer el desarrollo de los mecanismos de control intraestatales y realizar acciones que favorezcan la credibilidad y visibilidad de la gestión financiera pública y su control por la sociedad y sus organizaciones”.

A partir de este tablero, que puede aplicarse tanto a nivel nacional como a diferentes categorías político-institucionales, se pretende generar incentivos de mejoras para los responsables de la gestión pública y  servir como un aporte de información para el control social.