Como todos los años desde 2004, la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) publicó su informe llamado "El sistema de la crueldad". El documento presenta una radiografía de la situación en las cárceles y el desempeño de las fuerzas de seguridad en la provincia de Buenos Aires.

El relevamiento pretende ser un aporte para revertir las “graves violaciones de derechos humanos que aún se registran”, una tarea que involucra el compromiso de los tres poderes del Estado.

En términos generales, el estudio registró una "continuidad de la política criminal" vigente hace décadas. Esto se reflejó en el crecimiento de la población encarcelada y la persistencia de la práctica sistemática de la tortura en los lugares de encierro, entre otros aspectos.

En cifras, el reporte advierte 45 mil hechos de tortura y malos tratos, de los cuales alrededor de 7.900 son por cuestiones de negación de acceso a la justicia. Mientras que 32 mil casos son por aislamientos y agresiones.

Los datos y diagnóstico del estado del sistema penal actual surgen de las tareas de control y monitoreo que la CPM lleva adelante como Mecanismo Local de Prevención de la Tortura bonaerense.

Datos del informe 

El año pasado, los equipos técnicos de la Comisión Provincial por la Memoria realizaron 803 inspecciones a lugares de encierro; 38.571 entrevistas y comunicaciones con personas detenidas o con sus familiares; 26.183 presentaciones judiciales, entre otras. Además, se realizaron 134 denuncias por corrupción penitenciaria y policial. También se relevaron 982 prácticas policiales ilegales y se intervino por 590 víctimas en 160 localidades, que derivaron en 1.968 presentaciones ante la Justicia.

Durante 2022 murieron al menos 25 personas en comisarías bonaerenses.

Aumento de la población carcelaria

El informe confirma la continuidad de una política criminal que se expresa mostrando el crecimiento de la población encarcelada y las altas tasas de prisionización de personas. 

La cantidad de personas detenidas en la órbita del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) aumentó de 54.107 en 2021 a 55.621 en 2022, lo que elevó la tasa de encarcelamiento provincial de 306 a 311 detenidos cada 100.000 habitantes.

Por su parte, en cárceles y alcaidías pasó de 46.456 a 48.046, en monitoreo electrónico de 3.206 a 3.627 y en comisarías bajó de 4.445 a 3.948.

Mientras que la población carcelaria de la provincia de Buenos Aires creció un 11% en los últimos 10 años, la cantidad de personas detenidas aumentó un 93%. A pesar de este contexto, un dato del 2022 resulta positivo: el crecimiento interanual de la tasa de encarcelamiento fue del 3%, el más bajo desde 2015. 

Letalidad policial

En otro apartado, el informe analiza la situación del uso letal de la fuerza policial. En 2022 hubo 90 muertes ocurridas en territorio provincial. De esos 90 fallecimientos ocurridos, 53 tuvieron a efectivos de la policía bonaerense como responsables, 11 a agentes federales y 19 a personal de la policía porteña.

Muertes en comisarías

Según el texto, “las comisarías continúan siendo lugares donde no se respetan los derechos elementales”. En detalle, el 40% de los detenidos está en comisarías clausuradas por orden judicial y/o administrativa; persiste el incumplimiento de prohibir la aprehensión y detención de los grupos especialmente vulnerables (niños, niñas y adolescentes, personas enfermas, mujeres embarazadas y personas mayores de 65 años) y en casi todas hay sobrepoblación-hacinamiento e inhumanas condiciones de detención. 

Durante 2022 murieron al menos 25 personas en comisarías bonaerenses, lo que representa una tasa de 5,8 muertes cada 1.000 personas detenidas. Las muertes informadas como presuntos ahorcamientos fueron 13. “En la figura del suicidio muchas veces pretenden ocultar la responsabilidad policial en dicha muerte”, expresó el informe de la CPM.