El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible organizó una charla virtual para hablar del presente y los desafíos del ambiente desde una mirada con perspectiva de género. El objetivo del encuentro también fue reflexionar sobre el modelo de producción y todo lo que implica el desarrollo sostenible, tal cual explicó la presentadora del evento, Marita Olivarez.    

La primera expositora fue Claudia Tomadoni, que es Doctora en Geografía y coordinadora científica del Centro de Estudios Transdisciplinarios Argentina / Cono Sur –ARCOSUR, y que trajo al encuentro el concepto de glocalización, que es término que combina a la globalización y la localización. 

“Hoy tenemos una glocalización dependiente que es devastadora para el ambiente, agotadora para los individuos y perversa para el conjunto social”, analizó. En esa línea, afirmó que venimos desde hace dos décadas con modelos de exclusión y desarrollo que hacen que la pandemia deje en descubierto toda la acumulación critica que venimos teniendo como sociedad.  

Ante eso, Tomadoni propone un giro hacia la glocalización emancipadora: “tiene que ver con plantear una propuesta con nuevas estrategias de conocimiento y comunicación como la que estamos planteando las mujeres. Discutir un modelo de desarrollo, porque nos han dicho que el ambiente y el desarrollo no son compatibles”.  

En ese sentido, la coordinadora de la Red de Mujeres en Diálogo Ambiental aseguró que la pandemia representa una buena oportunidad para ese cambio. “El logro de la sustentabilidad para superar las vulnerabilidades sociales supone reordenar nuestros espacios urbanos y rurales con salud, agua potable, saneamiento, acceso a los servicios y con seguridad”, detalló. 

Por su parte, Cristina Maiztegui, quien es coautora de la Ley General de Ambiente y asesora del Senado de la Nación, explicó que la cuestión ambiental hoy está caracterizada por el agotamiento de los recursos naturales y por una gran exigencia a nivel social. “Es importante entender que si cada uno cambia y hace su aporte, la situación puede mejorar”, afirmó.  

Más allá de la colaboración de la sociedad, Maiztegui remarcó que es muy importante también dar respuesta desde el Estado. “La Constitución Nacional no solo habla de proteger a la naturaleza, sino también del patrimonio natural y cultural, es decir, que el hombre está incluido en el concepto de ambiente”, recordó.

Sobre la necesidad de la sociedad de satisfacer sus demandas a través de la producción de bienes y servicios puso en relieve que "los ritmos de la naturaleza son otros tiempos distintos a los de la economía y hay una descoordinación. Hay un condicionamiento fuerte sobre cómo se deben desarrollar de acá en adelante las actividades productivas”, concluyó Maiztegui.