Desde 1988, el 23 de abril se conmemora el Día Internacional del Libro. Es una fecha establecida por la UNESCO para fomentar la lectura y la industria editorial. En plena cuarentena y con las librerías cerradas ¿Cómo es el panorama del sector?

En Argentina hay más de 2.250 librerías, mientras que otros países como Perú, Colombia y Chile solo tiene alrededor de 100. Las editoriales que imprimen son alrededor de 2000 y publicaron 27.428 títulos nuevos en 2018, un número que viene en caída desde 2016. 

Desde la Cámara Argentina del Libro (CAL), el presidente, Martín Gremmelspacher expresó su preocupación. "Venimos de cuatro años donde la producción y las ventas se redujeron a la mitad. Esta pandemia nos pega muy fuerte porque este es el mejor trimestre de venta de libros. Estamos en una situación crítica y es necesario proteger nuestro patrimonio cultural porque es el que nos constituye como sociedad". Entre 2016 y 2018, se perdieron más de cinco mil puestos de trabajo en la industria gráfica. 

La Feria Internacional del Libro en Buenos Aires (FILBA) que se desarrolla hace 45 años es un evento muy esperado por todos los que forman parte del mundo del libro. De abril a mayo todos los años bibliotecas y librerías acceden a compras en grandes volúmenes de diferentes títulos. Para las editoriales constituye, más allá de las ventas, un momento de encuentro y difusión de sus productos. Lo mismo sucede con escritores y lectores.

Por primera vez en tantos años las autoridades de la FILBA se vieron obligadas a suspender. "Para nosotros tomar la decisión fue muy difícil. Había una gran expectativa desde la industria del libro porque después de cuatro años muy difíciles estábamos viendo una leve recuperación y pensábamos que iba a ser una edición muy buena", lamentó Oche Califa, director de la Feria del Libro donde en más de 20 días circulan alrededor de un millón de personas por los más de 500 stands que ocupan los 15 mil metros cuadrados en el predio de La Rural.

La crisis del sector editorial se agrava con el coronavirus

Ambas entidades, FILBA y CAL, enviaron una nota al Ministerio de Cultura y al Banco Central pidiendo consideración de la situación. Recién esta semana se habilitó la venta online con envío a domicilio de libros. Pero desde el 20 de marzo que el sector no tiene ingresos. "Se cortó la distribución y la edición. Recién esta semana estamos comenzando a mover las ventas.Todo lo que es comercialización fue cero hasta este momento. Fue una caída a pique. Nosotros no tenemos comercialización de libros electrónicos", resaltó Andrés Bracony integrante de la editorial Tinta Limón.

En este tiempo de aislamiento obligatorio y de librerías cerradas, la venta de libros electrónicos tampoco representó un porcentaje alto. Según Carlos Gazzera de Editorial Universitaria de Villa María (EDUVIM) "aún no tenemos la cultura de leer online, pero lo cierto es que acá el e-book representa el 1 % de las ventas, no se si es sustentable como modelo de negocio". Desde la editorial cordobesa comentaron que este año piensan no publicar libros en papel.

Con la cadena de pagos rota, los planes de edición suspendidos y la Feria cancelada el panorama parece aterrador, pero hay quienes apuestan a que esta coyuntura deje algo positivo en el sector. Para Luis Quevedo de Eudeba "la pandemia va a dejar nuevos hábitos. Muchas universidades venían postergando y resistiendo las clases online y ahora empezaron a probar nuevas tecnologías y nuevas mecánicas de funcionamiento. También aquellas personas que se acercaron a los e-books en cuarentena pueden llegar a ser nuevos lectores".