El Ministerio de Obras Públicas fue creado inicialmente en 1898 y, a lo largo de los distintos gobiernos, fue sufriendo cierres, reaperturas y modificaciones, devino en Secretaría, y se transformó fusionándose con distintos organismos hasta que en diciembre del 2019 recuperó su estatus de Ministerio. En diciembre de 2023, fue nuevamente disuelto mediante DNU y sustituido por el Ministerio de Infraestructura, recientemente incorporado al Ministerio de Economía.

Al respecto de esa última gestión, en el marco de la solicitud de auditorías por el cambio de mando del Poder Ejecutivo, la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) realizó una revisión que expuso algunas debilidades en el control de la ejecución de obras de los distintos programas, así como aspectos a mejorar en cuanto a plazos en las tareas.

Plazos incumplidos

Dentro de la gestión del Ministerio, muchas de las acciones se enmarcaban en programas, lo que permite definir objetivos, plazos, procedimientos y presupuestos. A la hora de revisar estos esquemas, la SIGEN detalló demoras e incumplimientos de los plazos estipulados, principalmente para la gestión de los pagos.

Los programas que presentaron estas falencias estaban relacionados con transporte y movilidad sostenible, obras públicas, recursos hídricos, e infraestructura urbana y educativa.

Estos proyectos también evidenciaron bajos niveles de ejecución de las tareas previstas, lo que, por ejemplo, en el Programa 87, "Apoyo para el desarrollo de la Infraestructura Educativa" devino en la contratación de una nueva obra de terminación, implicando extensiones significativas de plazo, redeterminaciones de precio que duplican el monto originalmente contratado y saldos sin ejecutar que suponen variaciones en la obra no explicitadas.

El documento también expone, en el caso del Programa 86, "Apoyo para el Desarrollo de Infraestructura Urbana en Municipios", “inacción por parte de la Secretaría” incluso una vez vencido “con exceso” el plazo para el inicio de la obra.

Este programa ya había presentado demoras en su accionar en un informe anterior de la AGN. En el mismo, realizado con respecto a la gestión del organismo en 2015, se expone que la mayoría de las comunas incluidas habían demorado más de 30 días en presentar sus rendiciones de cuentas.

Por último con respecto a la parte operativa, en el caso del “Programa de Desarrollo de las Provincias del Norte Grande: Infraestructura de Agua Potable y Saneamiento”, en cuanto a las obras examinadas en el 2022 se observó que los pliegos de licitación “deberían haber contemplado una adecuada definición de la ingeniería” para evitar indeterminaciones que luego generan modificaciones de obra, afectando los plazos y, por consiguiente, los costos y el término de las tareas.

En una auditoría realizada durante el 2022 a este mismo programa, ya se había señalado la ejecución de más del 100% del presupuesto en el proceso.

El cumplimiento de los plazos y la correcta ejecución de los montos estimados son factores clave a la hora de llevar adelante los programas de mejora e infraestructura. La falta de continuidad del Ministerio entre las gestiones afecta directamente al planeamiento, impactando en la vida de las personas que se benefician con su accionar.

Falencias administrativas

Además de los aspectos a mejorar en la ejecución de tareas y pagos, la SIGEN detectó inconsistencias en distintas instancias administrativas. Por ejemplo, en el Programa 73, "Recursos Hídricos", se hallaron deficiencias de supervisión y control en las tramitaciones realizadas y se observaron demoras en la presentación y pago de certificados.

Por otra parte, en el Programa 68, “Fortalecimiento de la Infraestructura para el Transporte y la Movilidad Sostenible”, las observaciones generales revelan problemas en la asociación de los expedientes en el Sistema de Gestión Documental Electrónica (GDE), y carencia de análisis técnico en los informes de visita de obra.

Se detectaron también dificultades para determinar el número total de obras por licitación pública, lo que sugiere falencias en la sistematización de la información.

En cuanto a observaciones particulares, se evidenciaron irregularidades en la ejecución de obras por convenio, problemas relacionados con el pago del anticipo financiero y demoras en la rendición de cuentas. Por último, en obras por licitación pública, se destacó la demora en la firma del acta de inicio y la desactualización de datos en el Sistema Gestión de Obras.